“La industria hace que los alimentos poco saludables parezcan buenos y los convierte en increíbles remedios, a menudo en contra de la salud”
El chocolate es saludable para el corazón? ¿El yogurt previene la diabetes tipo 2? ¿Las granadas ayudan a engañar a la muerte? La investigación financiada por la industria alimentaria certifica como beneficiosos para la salud alimentos que no lo son. La nutricionista Marion Nestle desmonta los engaños con que se trata de captar al consumidor: uvas que pueden mejorar las habilidades de conducción; aguacates que avivan el intelecto; almendras que reducen la grasa corporal, etcétera.
La autora de «Verdad desagradable» alerta contra las compañías que comercializan sus productos como un elixir milagroso argumentando que cuentan con estudios clínicos que demuestran que ayudan a reducir el riesgo de cáncer de próstata o la disfunción eréctil. Marion Nestle, profesora de la Universidad de Nueva York en nutrición, estudios de alimentos y salud pública, es considerada el enemigo de las multinacionales de alimentación y bebidas.
En sus estudios demuestra como una gran cantidad de investigación nutricional está financiada e influenciada por la industria alimentaria, que utiliza la ciencia como una herramienta de marketing. “Hace que los alimentos poco saludables parezcan buenos y los convierte en increíbles remedios, a menudo en contra de la salud”.
El peligro de los productos azucarados
En el punto de mira tiene a Coca-Cola, uno de los mayores financiadores de investigación nutricional. La multinacional de refrescos invirtió más de 6 millones de dólares en un informe denominado Estudio internacional sobre la obesidad infantil, el estilo de vida y el medio ambiente. Realizó un seguimiento de 6.000 niños, a partir de 2010, analizando su actividad física, sueño, hábitos de televisión y dieta. Los investigadores no buscaron una correlación entre la soda y la obesidad, por lo que no descubrieron el peligro de las bebidas azucaradas. En su lugar, encontraron que las correlaciones más importantes de la obesidad eran la falta de sueño, la actividad física baja y la frecuencia de mirar televisión. “Coca-Cola no podría haber pedido un mejor resultado”, subraya Marion Nestle.
Coca-Cola no es el único producto azucarado que parece menos saludable de lo que es. Smart Choices fue creado y financiado por los fabricantes de cereales Kellogg’s y General Mills para hacer creer a las madres que dan una alimentación saludable a sus hijos. La nutricionista denuncia este engaño de la industria que pretende hacer creer que los alimentos altamente procesados son tan saludables como los alimentos no procesados.
Fuente. La Celosía