Los candidatos a experto en Emergencias se enfrentan un simulacro de accidente múltiple como examen final.
Tres etiquetas y tres colores: rojo, amarillo y verde. Casi 50 alumnos se han evaluado este jueves del examen final del título de Experto Universitario en Urgencias y Emergencias de la Escuela Internacional de Ciencias de la Salud. Una prueba crucial para la evolución profesional de medio centenar de enfermeros que se ha desarrollado bajo un supuesto ‘apocalíptico’: el secuestro de una treintena rehenes a mano un delincuente armado paranoico que, además, ha consumido “droga caníbal”.
Valoraciones del presidente y la vicepresidenta del Consejo General de Enfermería minutos antes del examen. |
Un examen al que han acudido a ciegas (solo con estas etiquetas de colores) pues, como ha manifestado al inicio del simulacro el profesor José María García de Buen, “lo primero es etiquetar la gravedad de los heridos para ir distribuyéndolos en los diferentes puntos de atención”.
Como en todo examen final, los alumnos acuden a ciegas. Sin saber qué ha ocurrido. Entran a un terreno desconocido en el que se encuentran un choque frontal entre dos vehículos y un autobús lleno de futuros pacientes con heridas de bala, politraumatismos severos y ataques de pánico. Alrededor del punto caliente, sólo hay efectivos de los grupos de élite de la Guardia Civil y cuerpos de la Policía Local, ya han caputrado alterrorista. Comienza el examen.
“Mejor fallar ahora que hacerlo en una situación real”, introduce ante un nutrido público el profesor del máster. Autoridades como el presidente delConsejo General de Enfermería (CGE), Florentino Pérez Raya, o la directora de la Escuela y vicepresidenta del organismo, Pilar Fernández Fernández, observan atentos la representación. Un año más, no han querido perderse este espectacular examen.
Con la tensión del momento, los alumnos han tenido que demostrar cuál es su capacidad para organizar un siniestro, la coordinación de los puestos de mando, cómo realizar el triaje a las víctimas o el correcto manejo de un paciente politraumatizado. El ‘resultado’ (además de una actuación perfectamente coordinada) ha conllevado la correcta identificación de siete heridos graves, siete moderados y 30 heridos leves “que son derivados a centros de salud más distantes del punto caliente para no colapsar las Urgencias de los grandes hospitales”.
Tras acceder al autobús, el ‘infectado’ ha disparado a varios pasajeros que presentaban heridas de diferente consideración. |
«Imprescindibles»
Recordando los atentados del 11M en Atocha, el presidente del CGE ha puesto en valor -en declaraciones a Redacción Médica-; la función de todos los profesionales sanitarios “y especialmente los enfermeros”. “La Enfermería es el colectivo más importante del sistema sanitario español y estamos en primera de batalla en todos los siniestros”, ha manifestado.
Por su parte, la directora de esta Escuela, que cumple 30 años en este 2019, ha asegurado que al ser una situación real esta prueba toma «especial relevancia». “Hoy harán de médicos, enfermeros, técnicos… Nos sentimos muy orgullosos porque un gran número de las enfermeras que trabajan en los servicios de emergencias en este momento en la geografía española han sido alumnos nuestros”, ha recordado.
Al contrario de en años anteriores donde los alumnos se han tenido que enfrentar a amenazas bacteriológicas o atropellos múltiples como el ocurrido en la Rambla de Barcelona, en esta edición el terrorista había consumido MDPV (metiendioxipirovalerona), conocida comúnmente como droga caníbal. Un potente psicoestimulante que provoca taquicardia, vómitos, agitación, paranoia y confusión y que refleja, además, la labor de estos profesionales en el trato con drogodependientes. “Las enfermeras y los enfermeros estamos en todas partes, alado de las personas cuidadores y atendiéndoles en todos los momentos de su vida”, ha finalizado.
Muchos operarios de protección civil se han enfrentado a esta situación junto a los alumnos como parte de su entrenamiento rutinario. |