Crear una comisión de trabajo y delimitar las funciones son algunas de las medidas propuestas
Los profesionales de Enfermería han identificado una serie de dificultadesa la hora de realizar el triaje para lo que proponen siete medidas de mejora. Así se desprende del estudio ‘Enfermería en la clasificación de pacientes en Urgencias: dificultades y propuestas de mejora’, publicado en la Revista Enfermería Castilla y León.
La primera recomendación que hacen los enfermeros es la de crear una comisión o grupo de trabajo que valore la actividad de triaje y elabora protocolos de atención para conseguir una atención uniforme. En segundo lugar, proponen delimitar las funciones y la relación médico-enfermero para evitar duplicidad de funciones e invasión competencial.
Otra de las propuestas es que el enfermero solo se dedique al área de triaje, se amplíe la plantilla y se dote de las herramientas necesarias. También elaborar protocolos de valoración y actuación bien definidos que permitan mantener criterios uniformes a la hora de clasificar pacientes, dotando de mayor autonomía al profesional enfermero que realiza el triaje.
Por último, la propuesta de utilizar un triaje avanzado, incluyen la activación de códigos de emergencia y la petición de pruebas complementarias en función de los protocolos para iniciar la atención al paciente de manera precoz.
Dificultades
El estudio destacada un total de seis dificultades. La primera es la falta de soporte del equipo médico respecto de las decisión que toma Enfermería en la valoración del paciente; la inexperiencia de algunos profesionales y la falta de formación; la dificultad para poder leer y hacer investigación.
Respecto del personal, que el enfermero no se dedique de manera exclusiva a la clasificación de pacientes, el aumento de la demanda asistencial con el consiguiente burnout del profesional. Por último, la falta de un sistema informático flexible, el no acceso a la historia clínica y acontecimientos previos para la valoración del paciente.