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Próxima parada: bienestar desde la empresa

Santiago Feliu No Comments

Tiene sentido que vaya cobrando cada vez más fuerza en las empresas el cambio de denominación de “gestión de los recursos humanos” en favor de gestión de las “personas”.

Esta formulación sitúa a las personas como máxima prioridad y centro de atención de los objetivos empresariales como un fin en sí mismo, lejos de cualquier connotación instrumentalista del factor humano en la organización.

Para que esta tendencia no se convierta en una simple moda o en un maquillaje de carácter meramente terminológico, es imprescindible la puesta en marcha de actuaciones en las que verdaderamente se materialice el interés real por el empleado/a y su bienestar en la empresa.

Los empleados se sienten más a gusto y con ganas de desarrollar su potencial en aquella organización que les sabe retener y se preocupa de atender sus necesidades, inquietudes y aspiraciones. En la medida en que esto sea así, nuestra empresa será sin duda más competitiva.

¿Qué mayor responsabilidad social que garantizar la salud de tu plantilla? 

La cultura de la seguridad y la salud pasa a cobrar un valor estratégico en sí misma integrándose dentro del conjunto de políticas y programas de Responsabilidad Social Corporativa de la empresa.

La definición de códigos de conducta explicita la voluntad de la Dirección de desarrollar un conjunto de valores involucrados tanto en aspectos legales como éticos, solidarios y de responsabilidad para con la sociedad en la que vivimos.

El respeto a este marco de actuación contiene un efecto multiplicador sobre las personas en cuanto al grado de vinculación que perciben con la empresa, pues ven cómo ésta se involucra en fines de carácter social que nos afectan a todos y ante los que se adopta una posición proactiva pasando de los enunciados a los hechos.

En este sentido, los programas de bienestar y salud actúan como un mecanismo impulsor adicional de la Responsabilidad Social Corporativa de la empresa, no sólo por su contribución a la mejora de la salud física y psíquica de sus empleados, sino además, por la gestión de otros aspectos estrechamente relacionados con dicho bienestar, como son la  diversidad, la flexibilidad laboral, la equidad o la conciliación.

Family Day Seguro y Saludable realizado con Bridgestone- FirstStop

¿Cómo la gestión del bienestar nos puede ayudar a frenar las altas tasas de siniestralidad?

Si nos fijamos en los últimos datos publicados sobre siniestralidad laboral de 2018 hallamos un incremento del 3,7% en el periodo de enero a noviembre comparándolo con el mismo periodo de 2017.

La fría estadística nos debe hacer reflexionar: ¿en qué estamos fallando? Y, sobre todo, ¿qué es necesario hacer para evitar la siniestralidad y optimizar la seguridad, la salud y el bienestar de nuestros empleados/as?  

Es imprescindible que la prevención de riesgos laborales sea valorada como  un objetivo de primer nivel para toda empresa. Para ello ha de gestionarse  desde el convencimiento, y a partir por supuesto de las regulaciones de la abundante normativa legal de aplicación.

Es necesario no quedarse en lo estrictamente preceptivo e ir más allá de la aplicación de las medidas preventivas encaminadas a evitar la siniestralidad. Al final la seguridad, la salud y el bienestar de las plantillas constituyen un todo que requiere de una gestión integral y del mayor alcance posible.

En definitiva, los programas de bienestar y salud no solo profundizan y amplían los ámbitos a los que da cobertura la prevención de riesgos laborales, sino que además, abarcan el concepto de salud desde una perspectiva más amplia e integradora, lo que así es percibido por nuestros empleados/as.

Requisitos para que los programas de prevención sean efectivos 

El convencimiento a la hora de abordar los programas de prevención y bienestar pasa por tener en cuenta distintos aspectos clave que resultan esenciales de cara a la obtención de los mejores resultados en la implantación de nuestros proyectos de prevención y salud laboral. A día de hoy hay que incidir en ellos: 

  • No realizar programas de bienestar “pre-enlatados”: la empresa ha de realizar un diagnóstico previo que sea el punto de partida para crear un programa preventivo ad hoc. Resulta vital analizar la información que proviene de distintas fuentes con las que cuenta la empresa como son el absentismo, causas de siniestralidad, memorias de salud, riesgos psicosociales, colectivos… Con todos ellos se define el alcance y contenidos del programa y se identifican los indicadores clave que permitan medir los resultados obtenidos y las mejoras conseguidas. 
  • Un requisito indispensable es contar con una Dirección comprometida, con la incorporación de la salud como objetivo de primer nivel y el desarrollo de los programas previstos a tal fin. El empleado percibirá un interés real en las actuaciones preventivas si se materializan muestras inequívocas del compromiso con el programa por parte de los cuadros directivos. Es necesario pues que haya coherencia y autenticidad. .  En prevención, p.e: si nuestros colaboradores ven que sus jefes no participan en los simulacros de evacuación o no muestran interés por la salud de las personas que han sufrido un accidente de trabajo, difícilmente va a resultar creíble para el empleado que existan razones sinceras para preocuparse por su bienestar y salud.  
  • Es importante recabar la participación de la propia plantilla, tanto a través de los representantes legales (comités de seguridad y salud y los delegados de prevención) como los propios trabajadores/as. Contar con su compromiso y participación permite dirigir el programa hacia áreas de salud que puedan ser prioritarias y que susciten mayor interés y a su vez una mayor colaboración para implementar el programa. 
  • Ofrecer el feedback necesario y pertinente tras implementar el programa para medir los resultados obtenidos y planificar acciones de mejora. 

 Fuente : fundtrafic


Transfórmate: Programa de bienestar laboral

Santiago Feliu No Comments

Objetivo: Reducir los factores de riesgo de enfermedades crónico no transmisibles asociados a la mala alimentación e inactividad física y aumentar los conocimientos sobre estilos de vida saludable en el lugar de trabajo. Métodos: Estudio de Intervención laboral, en 190 colaboradores de sexo masculino con diagnóstico de Síndrome Metabólico, que aceptaron las condiciones del estudio. Se implementó un programa de bienestar mediante talleres educativos en donde los temas principales fueron: Las Guías de alimentación para Guatemala, cocina saludable, actividad física, pasometría y motivación para el cambio. Se brindó tratamiento dietético, mensajería de texto, análisis de perfil lipídico, glucosa en ayunas y tratamiento farmacológico. Se realizó una evaluación de conocimientos inicial y final. Los datos fueron analizados en STATA SE 11.0. Se calcularon medidas de tendencia central y dispersión. Se realizaron pruebas de hipótesis, utilizando la prueba de Wilcoxon para variables cuantitativas y Chi2 de McNemar para variables cualitativas. Resultados: Los factores de riesgo de enfermedades crónicas que redujeron significativamente fueron: Sedentarismo 33.2%, (pAutor principal: 

ZAMARÍLÓPEZ HURTADOCementos ProgresoGuatemalaCoautores: SideyCastillo MeléndezConsultor IndependienteGuatemalaAlejandraPeña PiedrasantaCementos ProgresoGuatemalaRicardoMendizabal BurasteroConsultor IndependienteGuatemalaVíctorRoldan GregorioCementos ProgresoGuatemala

Introducción

La epidemia de las enfermedades crónicas no transmisibles (ECNT) amenaza el desarrollo económico, social, la vida y la salud de millones de personas. Las enfermedades cardiovasculares, el cáncer y la diabetes, son la mayor causa de muerte prematura y de discapacidad en la mayoría de los países de las Américas (OPS 2007).

El síndrome metabólico se está convirtiendo en uno de los principales problemas de salud pública del siglo XXI. Asociado a un incremento de 5 veces en la prevalencia de diabetes tipo II y de 2 a 3 veces en la de enfermedad cardiovascular (ECV). (Scott 2008, Zimmet, Alberti y Serrano 2005, Garraleta, Al Donet y Huaman 2009)

Se ha demostrado que la prevalencia de síndrome metabólico está aumentando en todo el mundo, y para la población adulta se estima es de alrededor de 20 a 25%, en gran parte como resultado de una mayor prevalencia de obesidad y estilos de vida sedentarios (Alberti et al 2009, IDF 2006). La prevalencia general de síndrome metabólico reportada para América Latina es de 24.9 (18.8-43.3%) (Marquez, Macedo, Viramontes, Fernández y Vizamanos 2011)

Las empresas de Progreso se dedican a la producción y venta de cemento, cal y agregados para la construcción en Guatemala. Este grupo de empresas, promueve hábitos de buena salud entre sus empleados y considera el perfil epidemiológico nutricional de la población, para el diseño de intervenciones.

Tomando en cuenta que el lugar de trabajo es considerado un entorno prioritario para la promoción de la salud (OPS 2000), desde el año 2011 se realiza una evaluación periódica donde se encontró que el 71.6% de los trabajadores presentó algún grado de sobrepeso y obesidad y el 35.8% síndrome metabólico. Adicionalmente, se observó en esta población un 70.2% de inactividad física y un 92.1% de bajo consumo de frutas y verduras. (López, Castillo, Mendizabal y Peña 2013)

La mayor prevalencia de síndrome metabólico (47.3%) se encontró en el grupo de trabajadores de Cementos Progreso de Planta San Miguel del departamento de El Progreso, Guatemala. Tomando de referencia estos resultados se implementó “Transfórmate”, un programa de bienestar en el lugar de trabajo, el cual está conformado por un conjunto de intervenciones integrales con el objetivo de reducir los factores de riesgo de enfermedades crónico no transmisibles asociados a la mala alimentación e inactividad física, e incrementar los conocimientos sobre estilos de vida saludable.

Metodología

Estudio de intervención laboral, realizado en trabajadores voluntarios diagnosticados previamente con síndrome metabólico utilizando los criterios de la American Heart Association y del National Heart Lung Blood Institute (AHA/NHLBI). El enrolamiento de los participantes fue realizado durante marzo de 2013, se brindó seguimiento hasta octubre del mismo año.

Se impartieron talleres educativos sobre estilos de vida saludable. La información se detalla en la Figura 1.

Área de IntervenciónTítulo del TallerDescripción
Alimentación SaludableGuías Alimentarias para GuatemalaRecomendaciones de alimentación saludable promovidas por el MSPAS.
Manos a la ObraTaller de cocina. Preparación y degustación de platillos saludables, prácticos, económicos y culturalmente aceptables.
TipsConsejos útiles y prácticos sobre alimentación saludable y hábitos inteligentes.
Nutri-CineProyección cinematográfica donde se reforzaron conceptos sobre alimentación saludable y consecuencias a la salud provocadas por una dieta inadecuada.
Actividad FísicaActívatePromoción de las recomendaciones mundiales de actividad física brindas por la OMS. Cada participante contó con un pasómetro por un período de tres semanas con el objetivo de caminar 10 000 pasos diarios.
No te DetengasRutina de ejercicio utilizando artículos disponibles en casa.
Salud MentalPuedo Vivir Sin CambiarMotivación al cambio de comportamientos para adquirir y mantener un estilo de vida saludable.

Figura 1. Talleres educativos del programa Transfórmate. Abreviaturas: MSPAS: Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social de Guatemala; OMS: Organización Mundial de la Salud.

Se desarrolló material específico para educación de los participantes: diario de alimentos, recetario, guía semanal de ejercicio, registros de pasos diarios y cuestionario de evaluación de conocimientos inicial y final. Todos estos materiales fueron validados previos a ser entregados a los participantes.

Las actividades se complementaron con: controles mensuales de peso, tratamiento y seguimiento dietético personalizado, mensajería de texto semanal, fotografías del antes y después de cada participante además de material de apoyo audiovisual.

Se determinaron los niveles basales de lípidos en sangre (colesterol total, triglicéridos, colesterol HDL, colesterol LDL) y glucosa en ayunas. Como puntos de corte se utilizaron los criterios del Third Report of the Expert Panel on Detection, Evaluation, and Treatment of High Blood Cholesterol in Adults (ATP III). Se realizaron dos controles durante la intervención. A los participantes que presentaran alteración del perfil lipídico, se les prescribió tratamiento farmacológico con Atorvastatina 10mg + Ezetimibe 10mg, en dosis individualizadas en cada caso.

El programa fue ejecutado por un equipo multidisciplinario. Las intervenciones estuvieron a cargo de nutricionistas, el tratamiento farmacológico a cargo de médicos, el taller de motivación para el cambio fue impartido por un médico especialista en psiquiatría y el taller de actividad física estuvo a cargo de un entrenador certificado; se contó con el apoyo de profesionales en comunicación y personal administrativo para logística.

Los datos fueron analizados en STATA SE 11.0. Se calcularon medidas de tendencia central y de dispersión. Se realizaron pruebas de hipótesis, para variables numéricas se analizaron con la prueba de Wilcoxon y las variables categóricas con Chi2 de McNemar.

Las intervenciones fueron aprobadas por el equipo de salud ocupacional de Progreso. Los participantes aceptaron las condiciones del estudio, propósitos, procedimientos, posibles riesgos, beneficios y confidencialidad, firmando consentimiento informado.

Resultados

Se enrolaron a 190 participantes de sexo masculino. La edad mediana fue de 41 años (RIC 36-47 años), la  mediana de la talla fue de 1.69 metros (RIC 1.64-1.74), y el índice de masa corporal (IMC) mediano fue de 28.8 kg/m2 (RIC 26.9-31.0).

Los participantes se organizaron en 8 grupos y recibieron un taller mensual, con una duración de 90 minutos. En total se impartieron 64 talleres, con una asistencia promedio del 94%.

Entre los factores de riesgo de enfermedades crónicas no transmisibles, el 95% de los participantes presentaron triglicéridos alterados, 93% IMC mayor a 25 kg/m2 y el 89%  reportó un bajo consumo de frutas y verduras. Luego de las intervenciones, el 64% de los participantes mantuvo los triglicéridos alterados, el 91% el IMC mayor a 25 kg/m2 y 66% bajo consumo de frutas y verduras. El resto de factores de riesgo se muestran en la Figura 2.

Figura 2. Prevalencia de factores de riesgo de ECNT. Se presentan en orden decreciente según prevalencia basal. Definiciones operativas: bajo consumo de frutas y verduras: < 5 porciones/día; Sedentarismo: <150 minutos actividad física aeróbica moderada semanal o <75 minutos actividad física aeróbica intensa. Abreviaturas: HDL: high density cholesterol; Hipertensión: presión arterial ≥ 140/90 mmHg o diagnóstico previo; DM: diabetes mellitus; ECV: enfermedad cerebro vascular; M: masculino; F: femenino; LDL: low density cholesterol.

Se obtuvo una reducción de 6mmHg en la mediana de presión sistólica y una reducción de 3mmHg en la mediana de la presión diastólica con respecto a los datos basales.

En la Figura 3 se observa el cambio de clasificación de IMC antes y después de la intervención. El 93.1% de los participantes presentaron algún grado de sobrepeso y obesidad en la evaluación inicial, con una mayor proporción en sobrepeso grado II y obesidad grado I. Luego de la intervención disminuyó la proporción de obesidad grado I, aumentando así las clasificaciones de sobrepeso grado I y grado II.

La mediana de pérdida de peso fue de 3.2 Kg (RIC 1.52-5.10). La prevalencia de síndrome metabólico disminuyó en 51.0%. Los factores diagnóstico disminuyeron en la siguiente proporción: triglicéridos ≥ 150 mg/dL 30 %, presión arterial ≥ 130/≥ 85 mmHg 25.3 %, glucosa en ayunas ≥100 mg/dL 21.6 %, obesidad abdominal (cintura ≥102 cm) 20.5%, colesterol HDL ≤ 40 mg/dL 11.0 %.

Figura 3. Valoración estado nutricional de acuerdo al índice de masa corporal (IMC).

Con respecto a los factores de riesgo para síndrome metabólico, cerca de la mitad de los participantes presentaron 4 o 5 factores de riesgo en la evaluación inicial; quedando únicamente el 21% de los participantes con este número de factores al finalizar la intervención (Figura 4). Además, se encontró  diferencia significativa (p<0.000) entre la prevalencia inicial y final de factores de riesgo para diagnóstico de síndrome metabólico. La mediana de factores de riesgo de la evaluación inicial fue de 3, la cual  es significativamente menor en la evaluación final (2 factores). (p<0.001)

Existió diferencia significativa entre los niveles de Colesterol Total (p<0.001), Colesterol LDL (p<0.001), Colesterol HDL (p<0.001) y Triglicéridos (p<0.001) respecto a dar tratamiento farmacológico, sin embargo, se encontró que no existió diferencia significativa entre presencia o ausencia del diagnóstico de síndrome metabólico con respecto a dar o no dar tratamiento farmacológico (p: 0.151).

Figura 4. Cambio en el número de factores de riesgo para el diagnóstico de Síndrome Metabólico.

Con la estrategia de los 10 000 pasos, los participantes alcanzaron una mediana de 10 845 pasos diarios (RIC 9 433 -12 446) durante 3 semanas de pasometría. Se observó un incremento en los conocimientos de los participantes con una mediana de 60 puntos en la evaluación inicial y 90 puntos en la evaluación final (p<0.000).

Discusión de resultados

En la actualidad el síndrome metabólico se ha convertido en uno de los principales problemas de salud pública, su presencia se relaciona con 5 veces más riesgo a desarrollar diabetes mellitus tipo II y 2 a 3 veces más riesgo a desarrollar alguna enfermedad cardiovascular. (Scott 2008, Zimmet et al 2005, Garraleta et al 2009)

La Organización Panamericana de la Salud (2000) considera que el lugar de trabajo es un ambiente prioritario para la promoción de la salud en el siglo XXI. Fue en este ámbito, donde se desarrolló “Transfórmate”, programa de bienestar con el que se logró que más de la mitad de los participantes (51%) disminuyeran la prevalencia de síndrome metabólico.

Este conjunto de intervenciones desarrolladas en “Transfórmate” logró reducciones significativas en factores de riesgo cardiovascular y síndrome metabólico. Se alcanzó una reducción en sedentarismo, triglicéridos alterados, colesterol total alterado, glucosa en ayunas alterada y bajo consumo de frutas y verduras. La disminución de colesterol total y triglicéridos está asociada directamente a la administración de medicamentos (Ballantyne et al 2003). En un estudio realizado en Italia en 2007, se observó una disminución del 31% de la prevalencia de síndrome metabólico (Bo et al 2007). Al igual que el presente estudio, este únicamente incluyó a participantes con diagnóstico de síndrome metabólico, con un grupo de edad muy similar, sin embargo contó con una distribución de cerca de 40% de participantes de sexo masculino, diferencia principal a las características del presente estudio. La estructura de las intervenciones fueron similares, incluyendo recomendaciones escritas así como talleres demostrativos y/o actividades prácticas. En “Transfórmate”, se logró una mayor disminución de los factores de síndrome metabólico. Esta diferencia puede deberse a un mayor número de intervenciones para cambio de comportamiento, como talleres demostrativos de ejercicio, cocina saludable, incorporación de pasómetros, mensajería de texto semanal y taller de motivación para el cambio.

Ivester en 2010 realizó un estudio en 14 hombres y 27 mujeres con algún grado de sobrepeso y obesidad para determinar el impacto de un programa de intervención multifacética de dieta saludable y ejercicio sobre la reducción de peso, síndrome metabólico y bienestar. Reportan mejoras en adiposidad central, peso y la reducción de un 20% de síndrome metabólico. Respecto al tratamiento dietético, adicional a la restricción calórica se utilizaron suplementos de ácidos grasos poliinsaturados, relación del consumo de fibra soluble/insoluble, vino tinto y chocolate. A pesar de no haber alcanzado la reducción obtenida por el presente estudio, en futuras intervenciones se valorará la incorporación de este tipo de suplementos. (Ivester et al 2010)

Con respecto al consumo de frutas y verduras, en un estudio desarrollado en Reino Unido por Cox, observaron un cambio de cerca de la mitad de los participantes en aumentar el consumo de frutas y verduras (Cox et al 1998).

Aunque en nuestro estudio se realizaron intervenciones cara-cara, Cox seleccionó solamente a personas que se encontraban en una etapa de contemplación de aumento de consumo de frutas y verduras; aspecto que ya establece un proceso más avanzado dentro del estadio del cambio de comportamientos. Este será un aspecto que vale la pena incorporar en futuras intervenciones.

Uno de los mayores logros fue la disminución del sedentarismo. En un estudio en fábricas de Estados Unidos en 2005, Emmons reportó, a través de intervenciones en múltiples factores de riesgo, una reducción de 11%. En nuestro estudio se logró una mayor disminución del sedentarismo, esto puede asociarse a un mayor nivel de cumplimiento de las diferentes actividades realizadas durante la intervención, en contraposición a lo reportado por Emmons que fue cerca de la mitad de los participantes que se perdieron durante el seguimiento. Por otro lado, los factores contextuales, como estabilidad y ambiente laboral al momento de la intervención en “Transfórmate”, pudieron hacer más notorias las diferencias con este estudio.

El aumento de la actividad física también se vio influenciada por el uso de pasómetros. Esta fue una de las estrategias mejor recibidas, muchos participantes definieron rutas para incrementar su actividad física y alcanzar la meta de los 10,000 pasos diarios.

Sobre la efectividad de la pasometría existen posturas contrarias. Por ejemplo, en un meta-análisis de 2008, Minsoo determinó que esta estrategia tiene efecto moderado y positivo en el incremento de la actividad física (Minsoo, Simon, Tiago & Jin-oh 2009). Mientras que una revisión sistemática desarrollada por (Freak-Poli 2013) estableció que existe limitada información y de baja calidad que evidencie la efectividad de las intervenciones basadas en pasometría en el lugar de trabajo. Sin embargo, en este estudio la pasometría no es un componente único de la intervención sino que forma parte del conjunto de actividades, por lo que el impacto en el incremento de la actividad física de los participantes no puede ser atribuido solamente a esta intervención.

Respecto a los parámetros bioquímicos, Hartman et al. en 1995 observaron una disminución de niveles sanguíneos de lípidos 3.8% en el colesterol total tras la implementación de sesiones educativas sobre asesoramiento de alimentos bajos en grasa y el seguimiento de patrones de alimentación a cargo de dietistas. En este mismo año, Byers et al. reportaron una reducción del 6.5% para este mismo parámetro, luego de realizar sesiones grupales con educación sobre nutrición. Al comparar estos resultados se comprueba que la combinación de estrategias logra mejores resultados.

Se obtuvo una reducción media de 6mmHg en presión sistólica y de 3mmHg en presión diastólica, datos menores a las reducciones reportadas por Palileo (2012), 13 y 6 respectivamente mediante una intervención basada en mensajería de texto durante 12 semanas.

A pesar que la prevalencia de sobrepeso y obesidad no disminuyó significativamente (p<0.132), al analizar la mediana del índice de masa corporal se evidenció un cambio estadísticamente significativo correspondiente a 1 Kg/m2 (p<0.000).  A diferencia de los resultados reportados por Bravata et al. que en el año 2007, encontraron que usuarios mediante el uso de pasometría reportaron cambios modestos en IMC, disminuyendo 0.38 kg/m.

La mediana de pérdida de peso fue de 3.2Kg, valor superior al reportado por Patrick et al. en 2009 (2.8Kg) con un programa que utilizó mensajería de texto varias veces al día, llamadas telefónicas mensuales y educación nutricional impresa.

Se ha reportado que los hombres que padecen sobrepeso u obesidad, son ampliamente reconocidos como un grupo difícil de comprometer, a pesar de ser un grupo de alto riesgo a padecer enfermedades crónicas relacionadas con la obesidad. (Access Economics Pty Ltd 2008, Morgan Warren, Lubans, Collins y Callister 2011) Los hombres necesitan programas de pérdida de peso que incluya otros participantes con los que se puedan relacionar (Morgan et al 2011, Sabinsky, Toft, Raben y Holm 2007) y pueden sentirse incómodos formando parte de programas que mayoritariamente estén integrados por mujeres (Morgan et al 2011, Jolly y Aveyard 2011).

Una revisión sistemática realizada por Young M et al, en 2011 reporta que la evidencia existente sugiere que los programas de pérdida de peso exclusivos para hombres podrían ser una forma efectiva de comprometer
y ayudar a los sujetos de este sexo que padecen sobrepeso u obesidad. Adicionalmente, encontraron que hay mayor probabilidad de éxito en las intervenciones que adicionalmente incluyen tratamiento dietético hipocalórico, contactos grupales cara a cara y 3 o más contactos individuales al mes en promedio. El efecto de la motivación, producto de las reuniones grupales y camaradería formada entre los participantes de Transfórmate, fue uno de los aspectos clave para el desarrollo de todas las actividades a pesar de no haber realizado el número de contactos mensuales cara a cara,  como los reportados clave para el éxito por Young. El uso de mensajería de texto semanal, podría ser uno de los factores que permitió mantener la cercanía a lo largo de la intervención, así como el compromiso de la alta gerencia con las actividades de bienestar que desarrollan las empresas de Progreso.

Conclusiones

Se concluye que el conjunto de intervenciones implementadas, mediante el programa de bienestar Transfórmate, redujo significativamente la prevalencia de factores de riesgo de ECNT como el sedentarismo, parámetros bioquímicos alterados (glucosa en ayunas, colesterol total, colesterol HDL, colesterol LDL, triglicéridos), bajo consumo de frutas y verduras, tabaquismo y niveles de presión arterial alterada.

A partir de las lecciones aprendidas en este estudio, se considera importante la implementación de un programa permanente en esta institución para la promoción de estilos de vida saludable. De igual forma, se considera oportuno incorporar la medición de estadios del cambio de comportamiento para poder redefinir o intensificar las intervenciones.

Se debe contemplar el estudio de costo-efectividad de esta intervención para determinar y optimizar la implementación del mismo, con el objetivo de poder mantenerlo dentro de una racionalidad económica.

Agradecimientos

Se agradece al grupo gerencial y a todos los profesionales de las empresas Progreso que colaboraron en el desarrollo de la investigación; el liderazgo y el trabajo multidisciplinario mejoró de gran manera la calidad del trabajo realizado.

De igual forma se extiende un agradecimiento a ORP 2015 por brindar la oportunidad de compartir esta experiencia en el ámbito laboral.

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Influencia del turno rotativo en la salud de los trabajadores

Santiago Feliu No Comments

Contrastada la literatura sobre el trabajo a turnos se puede concluir que muchos de los trabajos realizados son experimentales y dirigidos al análisis de la relación entre el trabajo por turnos y los patrones de salud y bienestar de los trabajadores. Estos estudios comenzaron en 1927, pero solamente ganaron impulso después de la II Guerra Mundial. En los años 70 las técnicas de investigación se volvieron más comprensivas y sofisticadas lo que posibilitó llegar a una serie de conclusiones que serán relatadas en sus correspondientes apartados. Los turnos rotativos y el trabajo nocturno impactan negativamente en la salud física, psíquica y social de los trabajadores, por alteración del ritmo circadiano normal. Estas investigaciones confirmaron otros estudios realizados en Europa sobre el trabajo a turnos donde quedó comprobada una mayor dificultad de adaptación al horario de trabajo experimentada en trabajadores a turnos que en trabajadores en jornada normal, entendiendo por jornada normal horarios de 8 a 18 h. con descanso de 13 a 15 h para comer. Los trabajadores por turnos rotativos, al mudar frecuentemente de turno, encuentran mayor dificultad en ajustar sus ritmos biológicos a los patrones de sus horarios de trabajo. El trabajador por turnos rotativos corre diferente riesgo de salud comparado con trabajadores de jornada normal. El análisis de los cuestionarios indicó, entre otras cosas, que los trabajadores por turnos se adaptarían mejor si: El trabajo por turnos no fuese tan neurotizante. Sus horarios de trabajo les satisficiesen. El trabajo a realizar les agradase.

Autor principal: 

María CristinaBilottaInstituto Universitario del Ejército (IUE)ArgentinaCoautores: PurificaciónMerodoInstituto Universitario del Ejército (IUE)Argentina

Introducción

“Que duerma la buena gente. Es medianoche. Todo está en calma. La buena gente somos nosotros. Nuestra quietud está protegida por los que velan. El problema es que el grupo, bastante alegre de la “ronda nocturna” se ha transformado en una legión triste. Son los trabajos por turnos”. (Jaques Curie Profesor de Psicología Social de la Universidad de Toulouse-Le Mirail, 1985)

Llegar a un empleo decente, “work decent”, o sea la actividad productiva y creadora del hombre, como plantea la OIT, parece una utopía teniendo en cuenta las distintas condiciones que deberán afrontar los trabajadores. La disminución del rendimiento como consecuencia de la fatiga generada por el trabajo fijo nocturno, el turno rotativo y el síndrome de Jet Lag es una preocupación permanente en la vida moderna.

El intervalo del día durante el que se evidencia el mayor rendimiento del personal, en el ambiente laboral, se extiende entre las 8 y las 18 hs. Fuera de estos límites, los accidentes laborales son más frecuentes y de mayor intensidad, incrementándose significativamente si aumentan además, las horas de trabajo.

Por otra parte, la rotación en turnos desestabiliza los hábitos alimentarios, generando dispepsias, úlceras gastroduodenales, digestiones lentas, gastritis, sobrepeso, obesidad y adicciones.

En el documento sobre “Medicina del Trabajo” de Rositano y Nieto se establecen las siguientes conclusiones:

– La producción científica en Argentina, en la materia, es de poca significación.

– Es casi excepcional la investigación en Medicina del Trabajo y Salud Ocupacional a diferencia de los Accidentes de trabajo.

– La prevención se declama pero no se practica eficazmente, Tiene poca relevancia o no existe la conciencia del autocuidado, ni tampoco que la prevención es responsabilidad de todos.

– Las acciones sobre las condiciones y medio ambiente de trabajo (CyMAT) son escasas, aunque sean preocupación de los médicos.

El trabajo en turnos, cuyos efectos tóxicos sobre el organismo humano están ampliamente demostrados, ha ido en aumento, en las empresas desde la segunda mitad del siglo XX.

Las primeras evidencias sobre los efectos sobre la salud de los trabajadores, fueron tomados de los archivos de accidentes y enfermedades de 1200 enfermeras y un número similar de cocineras y celadores de hospitales. Con estos datos se elaboraron cuestionarios tendientes a identificar modificaciones fisiológicas y sintomatologías, debidas a la modalidad de trabajo en turnos. Las variables seleccionadas fueron sexo, edad, estado civil, malestares, patrones de alimentación y perfiles psicológicos

La descripción de los efectos perjudiciales del trabajo en turnos sobre trabajadores se presentó en 1978, en la I Conferencia Mundial sobre Estrés en el trabajo, celebrada en Ginebra. En ella se alertó sobre los múltiples efectos del trabajo en turnos, …“el trabajo en turnos es un problema de salud y de calidad de vida” de los trabajadores y sus familias.

En esta Conferencia se presentó un estudio de aproximadamente treinta meses, en el cual se mostraron, los efectos del trabajo por turnos (tarde, noche, rotativos), en el bienestar físico y mental de los trabajadores, en los países más industrializados.

Contrastada la literatura sobre el trabajo en turnos con los datos surgidos en esta Conferencia Mundial, se puede concluir que muchos de los trabajos realizados son experimentales y dirigidos al análisis de la relación entre el trabajo por turnos y los patrones de salud y bienestar de los trabajadores.

Estos estudios comenzaron en 1927, pero solamente ganaron impulso después de la II Guerra Mundial. En los años 70 las técnicas de investigación se volvieron más comprensivas y sofisticadas lo que posibilitó llegar a una serie de conclusiones que serán relatadas en sus correspondientes apartados.

Los primeros estudios que analizamos, mostraron el impacto del trabajo en turnos en la salud de los trabajadores. Las manifestaciones más frecuentes fueron alteraciones del sueño, trastornos digestivos, nerviosos y fatiga.

El malhumor y particularmente alteraciones del sistema nervioso, se conocieron en esta Conferencia mundial.La enfermedad presentada, tendría su origen por trabajar en el periodo de desactivación, y  no poder recuperar adecuadamente las energías gastadas, apareciendo de esta forma agotamiento físico y psíquico con las siguientes manifestaciones:

Úlceras

  • 1. Infartos
  • 2. Síndrome de Burnout
  • 3. Gastritis
  • 4. Acidez
  • 5. Constipación
  • 6. Estados Pre Neuróticos
  • 7. Alteración del Carácter
  • 8. Depresión
  • 9. Agresividad

Cada vez es mayor la acumulación de conocimientos científicos sobre los efectos adversos que provoca esta forma de trabajo.Y, a la luz del avance de la ciencia, la alternancia entre la vigilia y el sueño genera la sensación de bienestar o malestar.

En la literatura científica ha demostrado la presencia de factores extrínsecos e intrínsecos que pueden acelerar la aparición de envejecimiento precoz y depresión.

En cuanto a la exposición crónica, es bien sabido que provoca severos e irreversibles daños a la salud humana. La tendencia de realizar turnos rotativos y, mayor aún, xxxxla tendencia de los individuos a realizar trabajos nocturnos o tener una carga horaria que excede la recomendada por la ley, ha llevado a países como Estado Unidos, Francia, España y Alemania a realizar trabajos tendientes a investigar las repercusiones de esta modalidad de trabajo, sobre la salud de los individuos.

Se debe diferenciar el trabajo realizado por turnos rotativos y aquel realizado en un turno nocturno fijo, como, por ejemplo, los serenos.

Compromete, entre otros:

El sistema nervioso central y periférico manifestado por variaciones fisiológicas que conforman el ritmo circadiano, regidas por el hipotálamo. Las variables biológicas en juego son la temperatura corporal, el peso, el pulso, la presión arterial, accidentes electroencefalográficos, el humor y la eliminación de metabolitos urinarios.

  • Disminución de la capacidad cognitiva
  • Impacto neurocomportamental en adultos. En esta población, la exposición baja a moderadaes más controversial y son escasos los estudios que analizan esteefecto del trabajo en turnos en el largo plazo.
  • El sistema cardiovascular, por modificación del ritmo: SueñoVigilia, TrabajoReposo, se ve afectado con modificaciones de la  tensión arterial, (HTA), frecuencia cardíaca y. enfermedad coronaria, en comparación con aquellas personas que realizaron siempre un turno fijo. Además de aumento de la frecuencia respiratoria y la temperatura corporal.
  • El diagnóstico precoz se dificulta al no existir sintomatología específica, que depende mucho de factores externos pero también de la susceptibilidad individual de cada trabajador.

La OIT y otros organismos para la prevención de la contaminación muestran su preocupación por el tema.

En función de estos antecedentes, en el marco de las actividades de la Maestría en Seguridad e Higiene Ocupacional, se desarrolló un proyecto de investigación, análisis y recopilación de bibliografía científica, “Influencia del turno rotativo en la salud de los trabajadores” cuyas conclusiones se muestran a continuación y permitieron determinar la importancia de generar programas de prevención y colaboración entre países para adecuar las condiciones que permitan lograr una mejor adaptación dada por la armonía de los tiempos:

Organizacional – Biológico – Social –Psicológico

Que permitan mantener el Bienestar biologico, psicológico, social y espiritual de los trabajadores como precepto fundamental proclamado por la OMS.

Metodología

Se realizó un análisis de los registros de los Departamentos de Medicina Laboral de las empresas eléctricas seleccionadas para la investigación.

Se analizaron las Historias clínicas de una población de 164 trabajadores que realizaban Guardias rotativas turnos continuados, obteniéndose los siguientes resultados:

– Afecciones cardiovasculares: ocuparon el primer lugar 35,95% de los trabajadores padecía afecciones cardiológicas, que pudimos desagregarlas de la siguiente forma:

– 37,28% correspondían a HTA, el 33,89 a precordialgias y el 32,5%, a taquiarritmias.

– Afecciones psiquiátricas: ocuparon el segundo lugar, con el 31,09% dela población estudiada.

– Afecciones traumatológicas ocupan el tercer lugar con un 18,95% del total.

– Las patologías gastroenterológicas se observaron en el 14,02% de los trabajadores, representando la UGD, la constipación y hemorroides un 80% y la dispepsia hiposténica, al 17,39%.

– Las alteraciones Neurológicas ocupan 3,41%, donde el 72,7% observándose en los trazados electroencefalográficos, características típicas de los trastornos neurovegetativos

– Para el estudio de las prácticas higiénico-laborales se diseñó un cuestionario semi-estructurado, con preguntas abiertas y cerradas, completados en forma anónima por cada uno de los empleados.

– Durante el mismo período se seleccionó un grupo testigo voluntario, formado por 15 personas sin antecedentes de trabajos en turnos, y únicamente se habían desempeñado en tareas en turnos fijos, en distintos lugares de residencia y distinto tipos de trabajo. Los estudios fueron realizados en las cátedras correspondientes de la Facultad de Medicina la Universidad de Buenos Aires (UBA).

Resultados

I.- Del análisis de los datos se elaboraron los siguientes gráficos para facilitar su interpretación y análisis.

Gráfico 1: Patologías más frecuentes detectadas en la población en estudio.

Gráfico 1 bis: cuadro comparativo de todas las patologías entre la población en estudio (TR) y el (GT) grupo testigo

Gráfico 2: Repercusión cardiovascular en los trabajadores que realizaban GRTC

Grafico 2 bis: cuadro comparativo entre la patología cardiovascular en el grupo de trabajos en turnos rotativos (TR) y el grupo testigo (GT)

Gráfico 3: Patología digestiva en trabajadores que realizaban turnos rotativos

Grafico 3 bis: cuadro comparativo de la patología digestiva entre el TR y la GR

Gráfico 4: Repercusiones neuropsiquiátricas en la población estudiada

Gráfico 4 bis: cuadro comparativo entre las repercusiones neuropsiquiátricas en el grupo testigo (GT), y el personal en turno (TR)

Conclusiones

Los turnos rotativos y el trabajo nocturno impactan negativamente en la salud física, psíquica y social de los trabajadores, por alteración del ritmo circadiano normal.

Estas investigaciones confirmaron otros estudios realizados en Europa sobre el trabajo a turnos donde quedó comprobada una mayor dificultad de adaptación al horario de trabajo experimentada en trabajadores en turnos que en trabajadores en que se desempeñaban en una jornada normal. Entendiendo por jornada normal horarios de 8 a 18 h. con descanso de 13 a 15 h para comer.

Los trabajadores que realizan turnos rotativos, al cambiar frecuentemente de turno, encuentran mayor dificultad en ajustar sus ritmos biológicos a los patrones de sus horarios de trabajo. El trabajador turnos rotativos corre diferente riesgo de salud comparado con trabajadores de jornada normal.

En los gráficos presentados se muestra el análisis que hemos realizado de la comparación realizada, entre los datos obtenidos entre las patologías desarrolladas por la población en estudio (TR) y el grupo testigo (GT). De a observación de los mismos se demostró que ambos grupos presentan diferencias significativas dela morbilidad entre ambos grupos.

Este estudio nos permite aseverar que es necesario la intervención en el tema. Sería fundamental la creación de un grupo multidisciplinario en el ámbito académico, para desarrollar una política de prevención que permita evitar la aparición de patologías en todos los trabajadores que desempeñan sus actividades en turnos rotativos

De la encuesta surgió que:

Todos los trabajadores encuestados (n = 164) son hombres. El 70% tenían entre 21 y 25 años de edad, el 23% entre 26 y 30, y el 7% entre 30 y 35 años.

En cuanto al nivel de instrucción alcanzado, el total contaba con un secundario completo y el 10% se encontraba cursando alguna especialización, tecnicatura o licenciatura en Higiene y Seguridad en el trabajo.

Otros antecedentes de importancia son: el 70% este era su primer trabajo y el 30% no se había desempeñado en turnos rotativos. Finalmente todos (el 100% recibió capacitación específica para la función actual. El promedio de antigüedad en el puesto es de 5 años (rango: 1a 9).

En las encuestas manifestaron entre otras cosas que se adaptarían mejor si:

1.- El trabajo por turnos no fuera tan “neurotizante”.

2.- Sus horarios de trabajo no le trajeran problemas en su vida personal.

3.- El trabajo a realizar les agradase.

4.- Sensación de soledad y abandono.

Se identifican principalmente falencias en cuanto a la organización del trabajo.

El lugar donde realizan sus actividades no cuentan con las comodidades básicas y no tiene un espacio adecuado para el desarrollo de los procesos previstos, ya que el recinto no se encuentra aislado.

Recomendaciones

Se proponen las siguientes acciones, tendientes a evitar la aparición de patologías en los trabajadores en los trabajadores que realizan turnos rotativos:

– Control periódico de presión arterial, frecuencia respiratoria y frecuencia cardíaca en todos los trabajadores que se desempeñan en turnos rotativos y/o turnos nocturnos.

– Realización de estudios de laboratorio que deben incluir las determinaciones específicas de los indicadores biológicos de exposición (IBE) en muestras de sangre y orina con la finalidad de determinar: 1)Secreción de catecolaminas, 2) Cortisol plasmático, 3) Glucemia.

– Adecuación del ambiente laboral en cuanto a orden, limpieza, iluminación, protección de equipos, niveles de ruidos y adecuada relación interpersonal.

– El cumplimiento de la recomendación, acorde con lo establecido por la OMS, redunda no solo en la protección del trabajador, sino en que la empresa logrará evitar las ausencias por enfermedad y accidentes que, generalmente, conllevan juicios laborales evitables.

Discusión

En este trabajo se incluyeron los datos de la investigación y recopilación de datos que concluyó en el mes de agosto del año 2014.

Como aspecto destacable se menciona la utilización de diversas fuentes de información, observación directa de la tarea realizada, encuestas sobre prácticas laborales, análisis de las Historias Clínica y antecedentes en la población en estudio y la población testigo.

Es evidente que, si bien se observa un esfuerzo en el cumplimiento de ciertas normas de seguridad e higiene, no existe rigurosidad en las prácticas laborales preventivas porque al rotar no cuentan con supervisión en todos los turnos.

Recomendación sobre Normas preventivas generales

– Reducir al mínimo el periodo nocturno.

– Organizar las cargas del trabajo más pesadas y de mayor complejidad en los periodos diurnos

– Considerar que el trabajo nocturno afecta profesionalmente a las personas en edad avanzada (p.ej. último tercio de la vida laboral activa).

– Mantener los mismos miembros en un grupo de trabajadores que realicen el mismo turno, de manera que se faciliten las relaciones estables.

– Planificar y comunicar con la máxima antelación los turnos y horarios de trabajo.

– Posibilitar la máxima participación de los trabajadores en la organización del tiempo de trabajo

– Facilitar los mismos o similares medios asistenciales y sociales que en los turnos diurnos: médicos, comedores, transporte, etc.

– -Evaluar la organización del tiempo de trabajo y el trabajo nocturno a partir del análisis de los factores de trabajo y de los indicadores de riesgo: (encuestas de tolerancia y satisfacción con la organización del tiempo de trabajo de las personas implicadas, indicadores de alteración a la salud, como control de la TA, frecuencia cardíaca, etc.).

Finalmente, por ser cada vez mayor la necesidad de las empresas de contar con este tip de actividad es necesario incorporar esta actividad como un factor de riesgo nuevo que requiere una atención especial y determinar el control periódico específico para evitar la morbimortalidad asociada a este tipo de actividad.

Consideramos legítimo discutir la conveniencia de establecer estándares específicos, para controlar esta modalidad de trabajo, esto sin descuidar su factibilidad económica.

Por ello, los integrantes de este grupo de investigación, consideramos necesario reevaluar el límite establecido para personas no expuestas, conformando un comité de expertos en el Ámbito académico.

Agradecimientos

Agradecemos a la Facultad de Ingeniería del Instituto Universitario del Ejército Argentino que permitió la realización del presente trabajo de investigación, como también a la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires que colaboró desinteresadamente en la realización de los controles pertinentes.

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Diagnóstico de Salud a partir del Ausentismo por Enfermedades de Origen Laboral y No laboral

Santiago Feliu No Comments

Introducción El presente artículo describe el diagnóstico de salud de los trabajadores a partir del registro de ausentismo, la población que trabaja según variables sociodemográficas y ocupacionales e identifica los diagnósticos más frecuentes en el período de análisis presentados en el año 2014. El papel de la salud y la seguridad en el trabajo es fundamental para incrementar la competitividad y la productividad de las empresas y contribuir a la viabilidad de los sistemas de protección social, ya que se traduce en una reducción del costo de los accidentes y de las enfermedades, y en una mayor motivación de los trabajadores. Las alteraciones de la salud relacionadas con el trabajo (enfermedades y accidentes), pueden prevenirse desde las actividades bien enfocadas del programa de salud y seguridad, realizando la identificación y control de los agentes causales en el ambiente de trabajo y la vigilancia de la salud de la población trabajadora. Para la vigilancia de la salud de los trabajadores se dispone de las evaluaciones ocupacionales periódicas, del seguimiento al ausentismo de causa médica y a los casos de mesa laboral y de las actividades de prevención como la estrategia de inmunización a los trabajadores, entre otras. Metodología Tipo de Estudio. Descriptivo retrospectivo. Población. 556 trabajadores. Recolección de la información. Suministrada por Recursos Humanos y QSHE. Bibliografía relacionada como la Organización Mundial de la Salud, Oficina Internacional del Trabajo, Organización Panamericana de la Salud, Instituto Nacional de Salud, Ministerio de la Protección Social y los ministerios encargados del tema de riesgos profesionales. Análisis Estadístico. Se analizaron variables cualitativas, cuantitativas y las posibles asociaciones entre variables (Chi-cuadrado y Test exacto de Fisher en caso de tener frecuencias esperadas menores que 5). Cálculo de riesgos relativos. Conclusiones. Durante 2014 estuvieron incapacitadas 152 personas, con un reporte total de 298 incapacidades y 2.565 días perdidos (promedio de 8,6 días por incapacidad). 94% de las incapacidades se generaron a partir de una enfermedad común y 6% por accidente de trabajo. La mitad de las incapacidades no superaron los cinco días en el mes. Al tener en cuenta sólo días hábiles, la mitad de las incapacidades no superaron tres días. En tres grupos diagnósticos se concentran más de la mitad de las incapacidades temporales: alteraciones osteomusculares (20%), traumatismos (16%) y afecciones respiratorias (16%). Se encontró asociación entre tener incapacidad y el género (las mujeres tienen más probabilidad de tener incapacidad que los hombres); también se encontró asociación con la ubicación (las personas de Bogotá tienen más probabilidad de tener incapacidad que las de fuera). Por cada cien trabajadores que laboraron durante 2014 se presentaron 54 incapacidades y se perdieron 461 días por incapacidad, es decir que por trabajador se presentaron 0,5 incapacidades y se perdieron 4,6 días al año.Autor principal: 

HenryTocaruncho RodríguezPerenco Colombia LimitedColombiaCoautores: Martha IsabelRuizPerenco Colombia LimitedColombiaCarmen ElianaAngelPerenco Colombia LimitedColombiaAndreaTraslaviñaPerenco Colombia LimitedColombiaDoris del PilarGuerreroPerenco Colombia LimitedColombia

Introducción

El papel de la salud y la seguridad en el trabajo es fundamental para incrementar la competitividad y la productividad de las empresas y contribuir a la viabilidad de los sistemas de protección social, ya que se traduce en una reducción del costo de los accidentes y de las enfermedades, y en una mayor motivación de los trabajadores.[1] Las alteraciones de la salud relacionadas con el trabajo (enfermedades y accidentes), pueden prevenirse desde las actividades bien enfocadas del programa de salud y seguridad, realizando la identificación y control de los agentes causales en el ambiente de trabajo y la vigilancia de la salud de la población trabajadora.

Para la vigilancia de la salud de los trabajadores se dispone de las evaluaciones ocupacionales periódicas, del seguimiento al ausentismo de causa médica y a los casos de mesa laboral y de las actividades de prevención como la estrategia de inmunización a los trabajadores, entre otras.El presente artículo plasma los resultados obtenidos del ausentismo, convirtiéndose en un insumo importante para tener en cuenta a la hora de planear las intervenciones de promoción y prevención del Sistema de Gestión de Salud y Seguridad en el Trabajo, a la vez que ayuda a medir el impacto y la efectividad de las acciones ejecutadas.

Objetivos

General

Describir el diagnóstico de salud de los trabajadores a partir del registro de ausentismo del año 2014.

Específicos

Describir la población que trabaja según variables sociodemográficas y ocupacionales e identificar los diagnósticos más frecuentes en el período de análisis.

Contexto conceptual y epidemiológico

Ausentismo

La OMS define el ausentismo, como “la falta de asistencia de los empleados a sus puestos de trabajo por causas directa o indirectamente evitables, tales como enfermedad, cualquiera que sea su duración y carácter (común, profesional, accidente laboral), incluidas las visitas médicas, así como las ausencias injustificadas durante toda o parte de la jornada laboral, y los permisos circunstanciales dentro del horario laboral”.

La OIT define el ausentismo como “la no asistencia al trabajo por parte de un trabajador del que se pensaba iba a asistir, quedando excluidos los períodos vacacionales y las huelgas”; y el ausentismo laboral de causa médica, como “el período de baja laboral atribuible a una incapacidad del individuo, excepción hecha para la derivada del embarazo normal”.El ausentismo da lugar a ciertas condiciones que entorpecen el funcionamiento adecuado de las empresas: reemplazo de personal, pérdidas en la productividad y calidad de los servicios y desmotivación de la fuerza laboral por sobrecarga de los que no faltan y deben hacer el trabajo de los ausentes.

Las pérdidas económicas del ausentismo no las sufre sólo la empresa y la entidad de seguridad social respectiva; en un estudio realizado en empresas de Medellín, se encontró que el costo del ausentismo se reparte así: 63% la empresa, 26% la entidad de seguridad social y 11% el trabajador.

El Decreto 614 de 1984 obliga, dentro de los contenidos mínimos del Programa de Salud Ocupacional, a desarrollar actividades de vigilancia epidemiológica del ausentismo a causa de enfermedades profesionales y patología relacionada con el trabajo (Artículo 30, literal b) y a elaborar y mantener actualizadas las estadísticas sobre ausentismo (Artículo 30, literal c).

La Resolución 1016 de 1989, establece que las empresas deben llevar registros de ausentismo general, por accidentes de trabajo, por enfermedad profesional y por enfermedad común (Artículo 14, numeral 7).El ICONTEC a través de la NTC 3793, establece los criterios para la clasificación, registro y estadísticas del ausentismo laboral en Colombia:

Tabla 1. Clasificación de ausentismo laboral.

Causas no relacionadas con la saludCausas relacionadas con la salud
Legales pactadas en el Código Sustantivo del TrabajoExtralegales pactadas en convenciones y acuerdosOtras formas de ausentismo autorizadas o no (detenciones, problemas personales y familiares)Accidente comúnAccidente de trabajoEnfermedad generalEnfermedad laboralControl preventivo

Fuente: Adaptado de NTC 3793.

El índice habitualmente empleado tanto para mostrar las estadísticas de los diferentes países, como para publicar los resultados empresariales, es el de la tasa media, entendida como la relación entre el número de horas perdidas y el número de horas posibles de trabajo, en un periodo de referencia determinado.[2]

Vale la pena resaltar que las fuentes de información representan una dificultad a la hora de establecer comparaciones entre los resultados del ausentismo justificado por motivos de salud, debido a las diferencias existentes entre los sistemas de seguridad social de los distintos países (EWCO, 2010). Los datos de los que se dispone generalmente para calcular los índices de ausentismo, se obtienen de dos tipos de fuentes: servicios de salud y encuestas realizadas a empresarios y trabajadores.[3]

Panorámica mundial

Los datos encontrados en estudios sobre la incidencia del ausentismo en la Unión Europea reflejan la evolución de la incapacidad temporal y señalan que en 1996 los trabajadores españoles perdieron 260,73 millones de horas de trabajo, por enfermedad.

En los países del norte de Europa, los días de trabajo perdidos por enfermedad han ido incrementándose: en Suecia, el número promedio de días de incapacidad temporal por trabajador y año, pasó de 17 en 1995 a 32 en 2002; en Noruega, la media anual de días de enfermedad por trabajador se incrementó también de 18 en 2000 a 20 en el primer semestre de 2002.[4]

Los datos de ausentismo en España en el periodo 2004 a 2008[5] destacan un incremento del número promedio de horas de trabajo perdidas por empleado al año, al pasar de 55.4 horas (2004) a 62.5 horas (2008). El índice de ausentismo laboral, según el Ministerio de Trabajo e Inmigración español, ha ido en aumento durante los últimos diez años, como se aprecia en la gráfica 1.

Fuente: Encuesta de Coyuntura Laboral, Ministerio de Trabajo e Inmigración, 2011.

Gráfica 1. Índice de ausentismo laboral medio en España.

Consolidando los resultados y estudios acerca del comportamiento del ausentismo en Europa, la consultora Pricewaterhouse Coopers (PwC), con un estudio referente al año 2006, indicó que Francia registró la tasa de ausentismo laboral más alto de Europa, con 4,5%, mientras que Italia la menor, con 3%.

Tabla 2. Distribución de índice de ausentismo anual en países de la Unión Europea, 2006.

PaísMedia
AustriaBélgicaFranciaAlemaniaEspañaPortugalIrlandaItaliaHolandaPaíses EscandinavosSuizaGran Bretaña3,14,14,54,44,14,13,83,03,93,73,83,9

Fuente: Adaptado de la encuesta realizada por PwC en el año 2006.

Por su parte, en Canadá, se estima que los días de enfermedad en la población, costaron a su economía 16,6 mil millones de dólares en 2012, según informe del Conference Board ofCanadá (CBoC), igualmente informa una tasa promedio de ausentismo de los empleados a tiempo completo de 9,3 días en 2011, casi dos semanas completas de trabajo. Esta tasa es relativamente alta, comparada con países como Estados Unidos y Reino Unido, donde la tasa promedio de ausentismo está entre 5 a 7 días al año.

Las tasas de ausentismo en 2011 fueron más altas en el sector público (12,9 días) en comparación con el sector privado (8,2 días). Por sectores, las tasas de ausentismo más altas se observaron en el cuidado de la salud y el sector de la asistencia social, seguida por el gobierno y la administración pública.[6] Los países que disponen de datos más completos sobre ausentismo por causas de bajas médicas son España, Suiza, Finlandia, Australia, Canadá, Dinamarca y Estados Unidos. Con la recopilación de estos datos la OECD Health Data elaboró un informe con el fin de observar el comportamiento del fenómeno del ausentismo.[7]

Fuente: OCDE HEALTH DATA 2012 “Bajas laborales”

Gráfica 2. Promedio de días perdidos por trabajador por año a causa de bajas médicas, 2012.

Las cifras presentan grandes diferencias, lo que permite identificar países con un alto promedio de días perdidos por trabajador, como España y países con bajo promedio de bajas laborales como Estados Unidos, que presenta igualmente una tendencia a reducirlo.

Como se mencionó anteriormente, diversos estudios refieren los bajos índices de ausentismo en Estados Unidos, donde con datos publicados por la oficina de estadísticas laborales (Bureau of Labor Statistics), se corrobora esta afirmación:

Tabla 3. Comportamiento del ausentismo en Estados Unidos, 2008 a 2012.

Indicadores20082009201020112012
Tasa de ausentismo3,13,33,13,03,1
Tasa de días perdidos1,71,71,61,51,5

Fuente: Adaptado de U.S Bureau of Labor Statistics, 2013.

Dentro de la tasa del último año reportado (2012), el ausentismo por enfermedad y accidente correspondió a 2,1 y por otras razones fue de 1,0. Discriminando las tasas de ausentismo y horas perdidas por etnia o raza del trabajador, los afroamericanos encabezan la lista con un índice de 3,6, seguido de los blancos (3,1), latinos (3,0) y asiáticos (2,3). Por edad y género, la mayor tasa de ausentismo la presentan las mujeres del grupo de edad de 16 a 19 años (4,8), y la mayor tasa de número de días perdidos por ausencias, las mujeres de 25 a 54 años (2,2).

Tabla 4. Ausentismo por edad y género. Estados Unidos, 2012.

Grupo de edad16-1920-2425-5455  y más
GéneroHMHMHMHM
Tasa de ausentismo3,24,82,43,82,14,22,94
Tasa de horas perdidas11,70,91,512,21,62,1

Fuente: Adaptado de U.S Bureau of Labor Statistics, 2013.

Por sectores económicos y ocupaciones, se encuentran tasas de ausentismo bajas (con valores menores a 2,5) en el sector de minería, canteras y extracción de petróleo y gas (1,9), comercio y ventas (2), arquitectura e ingeniería (2,2), finanzas, matemáticas y computación (2,4) y agricultura (2,4). De otro lado, tasas de ausentismo superiores a 3,5 se observaron en el área del cuidado de la salud, el sector público y del gobierno, servicios sociales y comunitarios y la construcción:

Fuente: Adaptado de U.S Bureau of Labor Statistics, 2013.

Gráfica 3. Tasa de ausentismo anual en diversas actividades económicas.

Estados Unidos, 2012.

Causas de ausentismo

 revisando las causas del ausentismo por problemas de salud, la Agencia Europea para la seguridad e higiene en el trabajo (Oficina de Estadística de la Comunidad Europea, 2001), indica que las patologías de índole psicosocial generan 18% de las bajas de salud, con procesos de una duración media de más de 2 semanas en 28% de los casos; tras analizar el impacto del estrés en siete países de la Unión Europea, se presenta el hecho agravante de que los trabajadores en incapacidad temporal de larga duración por este diagnóstico, tienen una probabilidad muy baja de volver a trabajar.[8]

Tratando de identificar las causas del ausentismo, algunos países han estudiado ampliamente el tema, como España y Brasil. En España, por ejemplo Gimeno y Martínez (2003) evidenciaron que la alta demanda psicológica y el bajo control en el trabajo, están relacionados con distintos tipos de ausencias por razones de salud. Así mismo, Castejón y Benavides (2006) demostraron que un porcentaje significativo de incapacidades temporales por enfermedad común, estaban relacionadas con las condiciones de trabajo.[9]

Becker y Carvalho de Oliveira, en un estudio sobre ausentismo, realizado en profesionales de enfermería del Centro Psiquiátrico de Manaos (Brasil), evidenciaron que factores como largas jornadas de trabajo, altas demandas de tiempo, poca autonomía y trabajo repetitivo, pueden producir accidentes y enfermedades, contribuyendo al ausentismo de los trabajadores.

En Chile se realizó el trabajo de recopilación de 30 años de estudio sobre ausentismo laboral, con el análisis de 14 tesis y artículos científicos, publicado en la Revista Médica de Chile, donde reportan los siguientes hallazgos: las tasas de ausentismo laboral más altas se encontraron en el sector hospitalario, con tasa de incapacidad de 14,3 días por trabajador; en el sector de la minería la tasa de incapacidad fue de 12 días por trabajador y en el sector industrial la tasa de incapacidad alcanzó 7,1 días.Prácticamente en todos los grupos las enfermedades respiratorias ocupan el primer lugar de prevalencia, seguido de las osteomusculares y del aparato digestivo.[10]

En uno de los sectores más representativo (la minería), se analizó el ausentismo por causa médica y no médica en trabajadores que realizaban turnos rotativos en una compañía de extracción de minerales, reportando que el índice de ausentismo general era de 8.8 días de ausencia por 100 días de trabajo; de estas ausencias, 85% correspondía a causa médica.

Entre las enfermedades analizadas, las del tracto respiratorio, fueron las más prevalentes, seguidas de traumatismos y enfermedades osteomusculares (que tenían la mayor severidad, con valores por encima de los 10 días perdidos).

Dentro de los aportes realizados por una investigación de ausentismo laboral de causa médica en el Hospital Universitario de los Andes de Mérida, Venezuela, en el período comprendido entre 2001 y 2003, cabe destacar una alta frecuencia de certificaciones de reposo médico (10.333), con 250.027 días de ausencias y un promedio anual de 953 trabajadores ausentes (47% del total de trabajadores de la institución). La tasa promedio de ausentismo fue 241,9 días de ausencias y la prevalencia anual de 3,6 incapacidades por cada trabajador certificado.

La mayor frecuencia de ausentismo se produjo en personal femenino (80,8%). Las causas médicas que más afectaron fueron las enfermedades osteoarticulares (41,2%) y las enfermedades del sistema respiratorio (11,5%).[11]

Ausentismo en Colombia

No se dispone de un informe general por parte de una entidad gubernamental, ni de datos actuales que den una idea del comportamiento del ausentismo laboral por regiones ni por tipo de empresas. Se presentan como referencia los resultados de tres estudios de instituciones universitarias, donde se ha definido una población concreta de trabajadores, un problema y objetivos puntuales por resolver; de tal manera que los hallazgos encontrados, ilustran el contexto del ausentismo, pero no son representativos de la población colombiana.

Tabla 5. Características del ausentismo en diferentes empresas colombianas.

Tipo de entidadAusenciasEdadGéneroCausasOtros
Institución universitaria1.620 incapacidadesPromedio 6,6 días por incapacidad42,5 incapacitados por cada 100 trabajadoresEdad promedio de ausentistas 48,3 años32,9 hombres por cada 100 y 54,2 mujeres por cada 100Respiratorias (30,8%)Osteomuscular (18%)Traumatismos (8,8%)50% de incapacidad igual o inferior a 3 días de duración
Centro médico de nivel 1332 incapacidades1.518 días perdidos23,6 incapacitados por cada 100 trabajadoresPorcentaje más alto en grupo de 26 a 30 años (23%)78% de incapacidades en mujeresRespiratorias (31,9%)Digestivas (22,9%)Osteomuscular (13%)Día de la semana con mayor número de incapacitados: lunes
Extracción de minerales130 incapacidades673 días perdidosPromedio 4,28 días por trabajadorGrupo de 18 a 29 años (57%)Promedio edad ausentistas 28,6 años84% ausentistas repetitivos del género masculinoOsteomuscular (27 incapacidades)Traumatismos (18 incapacidades)Día de mayor ausentismo: lunes

Fuente: Adaptado de estudios de ausentismo en Colombia.

Metodología

Tipo de estudio

Se realizó un estudio descriptivo, el cual como su nombre lo indica, describe el comportamiento de un evento, la distribución de su frecuencia en una población, referida a un lugar y tiempo dados. A su vez es un estudio retrospectivo, ya que se realizó para estudiar el comportamiento de un evento anterior al momento de la investigación.[12]

Población

La población de referencia la comprenden los trabajadores a diciembre de 2014 a los que se les hizo análisis del ausentismo, que corresponde a556personas.

Las tablas y gráficas contenidas en este informe que no cuenten con referencia bibliográfica fueron creadas específicamente para este estudio, tomando como fuente principal los registros propios de la Compañía.

Recolección de la información

La información de los trabajadores fue suministrada por la Gerencia de Recursos Humanos y la información del ausentismo por el Líder de Salud de la Gerencia QSHE de la Compañía.

Con el fin de tener un contexto epidemiológico mundial y nacional, se revisó bibliografía relacionada, proveniente de entidades que son autoridad en la materia, tales como la Organización Mundial de la Salud, la Oficina Internacional del Trabajo, la Organización Panamericana de la Salud, el Instituto Nacional de Salud, el Ministerio de la Protección Social y los ministerios encargados del tema de riesgos profesionales en otros países.

Análisis estadístico

El análisis se hizo de acuerdo con el tipo de variable:

  • Cualitativas: Cálculo de frecuencias relativas individuales y combinaciones entre ellas.
  • Cuantitativas: Cálculo de principales medidas de resumen estadístico: de tendencia central (media aritmética y media geométrica, según el caso), de dispersión (mínimo, máximo y desviación estándar) y de posición (mediana y percentiles). Además estas variables se agruparon luego por categorías para observar su distribución porcentual.

Posteriormente se analizaron las posibles asociaciones entre variables por medio de pruebas de independencia utilizando la distribución Chi-cuadrado y el Test exacto de Fisher (en caso de tener frecuencias esperadas menores que 5).Se hizo el cálculo de riesgos relativos para conocer los grupos con mayor probabilidad de presentar alguna patología.

La comparación de la empresa con el país y el continente se hizo utilizando razones estandarizadas de morbilidad.

Para el análisis descriptivo se utilizó el programa Microsoft Excel versión 15.0 y para las pruebas estadísticas se utilizó el programa Epi Info versión 3.3.2.

Resultados

Perfil socio-demográfico

Predomina el género masculino (88%), es decir que por cada mujer hay aproximadamente siete hombres. La mitad de la población tiene entre 32 y 44 años. La mínima edad es de 21 y la máxima de 65 años.

Analizando simultáneamente la distribución por edad y género, se aprecia que las mujeres son un poco más jóvenes (promedio de edad de 37 años, frente a 39 años de promedio en los hombres) y tienen una distribución de edad más simétrica (coeficiente de variación 20%, frente a 23% en los hombres). La edad mínima en las mujeres fue de 23 años y la máxima de 53, mientras en los hombres la mínima fue de 21 y la máxima de 65 años.

Distribución de trabajadores según género y edad.png

Gráfica 4. Distribución de trabajadores según género y edad 2014.

En cuanto al estado civil, cerca de las dos terceras partes de los trabajadores (63%) viven en pareja, bien sea casados o en unión libre.

Gráfica 5. Distribución de trabajadores según estado civil 2014.

Perfil ocupacional

La distribución de la antigüedades bastante asimétrica (coeficiente de variación= 104%), encontrándose valores entre 0 y 32 años. Predominan las antigüedades bajas, puesto que la mitad de la población lleva máximo cinco años trabajando en la empresa y 75% lleva máximo ocho años. En cuanto a la edad de ingreso, la mitad de los trabajadores llegaron a la compañía cuando tenían 30 años o menos.

Las tareas desarrolladas por los trabajadores se agrupan según las funciones desempeñadas en cargos de tipo administrativo, operativo y algunos mixtos (porque contemplan labores administrativas y operativas).Dentro de los cargos administrativos se encuentran gerentes, administradores, profesionales de diferentes disciplinas, coordinadores, supervisores, asistentes y auxiliares, entre otros.

Gráfica 6. Distribución de trabajadores por tipo de cargo 2014.

Los cargos mencionados anteriormente se encuentran distribuidos en 16 dependencias de la compañía, mostrando que en tres de ellas (Producción, Mantenimiento y Operaciones) se concentra 61% de la población.

En cuanto a ubicación geográfica, aproximadamente tres de cada cuatro trabajadores se encuentra en Casanare (72%).

Gráfica 7. Distribución de trabajadores según centro 2014.

Esta distribución presenta diferencias según género, ya que la mayoría de mujeres (63%) están en Bogotá, y la mayoría de hombres (79%) se encuentra en Casanare.

Tabla 6. Distribución de trabajadores según género y centro 2014.

CentroFemeninoMasculinoTotal
Bogotá7,7%12%19,7%
Casanare2,7%69%71,7%
Guando1,1%4%5,1%
Purificación0,7%2%2,7%
Total12,2%87%100,0%

Caracterización delas condiciones de salud de la población

Como se indicó anteriormente, se evaluaron556 trabajadores, a partir de los cuales se hizo la caracterización del perfil de salud.

Durante 2014 estuvieron incapacitadas 152 personas, con un reporte total de 298 incapacidades y 2.565 días perdidos (promedio de 8,6 días por incapacidad). En primer lugar se hace una descripción de las características sociodemográficas y ocupacionales de la población que tuvo incapacidad y luego se exploran posibles asociaciones entre variables para ver si proporcionalmente, un grupo tiene más probabilidad de ausentarse que otro.

Del total de incapacitados 72% corresponden a hombres. El promedio de edad es 39 años, con un mínimo de 21 y un máximo de 60 años, mostrando una ligera asimetría (coeficiente de variación 23%).

Ausentismo - Distribución de trabajadores según género y edad.png

Gráfica 8. Distribución de trabajadores incapacitados según género y edad 2014.

Dentro de los trabajadores incapacitados predominan las antigüedades bajas, puesto que cerca de las dos terceras partes (63%) llevan menos de 10 años trabajando en la empresa. La distribución de la antigüedad es bastante asimétrica (coeficiente de variación= 96%), encontrando valores desde 1 hasta 32 años.

Gráfica 9. Distribución de trabajadores incapacitados según antigüedad 2014.

La localización más frecuente del personal incapacitado es Casanare con 46%, ubicados en operaciones de Cegoc, Yopal, Yalea y Oropéndola.

Gráfica 10. Distribución de trabajadores incapacitados según centro de trabajo 2014.

De la población incapacitada 41% desempeña cargos de tipo administrativo en los diferentes centros de trabajo, destacándose Bogotá con 56% de ellos.

Gráfica 11. Distribución de trabajadores incapacitados según tipo de cargo 2014.

94% de las incapacidades se generaron a partir de una enfermedad común y el 6% restante por accidente de trabajo. Los meses en que se reportaron más incapacidades fueron agosto, septiembre y octubre con cerca de 12% de ausencias cada uno.

Ausentismo - Distribución de incapacidades según mes.png

Gráfica 12. Distribución de incapacidades por mes 2014.

Pasando a analizar la duración de las incapacidades, la mitad no superó cinco días en el mes.

Ausentismo - CB - Días IT.png

Gráfica 13. Comportamiento de duración de incapacidades temporales. 2014.

Si se observan sólo los días hábiles, la mitad de las incapacidades no superaron tres días.

Ausentismo - CB - Días hábiles IT.png

Gráfica 14. Comportamiento de duración de incapacidades temporales (días hábiles)2014.

En tres grupos diagnósticos se concentran más de la mitad de las incapacidades temporales: alteraciones osteomusculares (20%), traumatismos (16%) y afecciones respiratorias (16%).

Gráfica 15. Distribución de incapacidades según diagnóstico CIE 10 2014.

Se encontró asociación entre presentar incapacidad y el género (p<0,0000000); las mujeres tienen 1,81 (181%) veces más probabilidad de tener una incapacidad temporal que los hombres. También se encontró asociación entre presentar incapacidad y la ubicación (p<0,0000000); las personas que trabajan en Bogotá tienen 2,24 (224%) veces más probabilidad de tener una incapacidad temporal que las personas de fuera de Bogotá. No se encontró asociación entre presentar incapacidad y la edad (p=0.2384067), la antigüedad (p=0.2947627) ni el tipo de cargo (p=0.4134845).

Indicadores de ausentismo: como se dijo anteriormente, 152 personas estuvieron incapacitadas, con un reporte total de 298 incapacidades temporales y 2.565 días perdidos. A continuación se presentan los resultados y la interpretación de los indicadores de ausentismo.

Índice de frecuencia de ausentismo =         No. de ausencias       x  100

No. de trabajadores

= 298 x 100 = 54% 556

Por cada cien trabajadores que laboraron durante 2014, se presentaron 54 incapacidades.

Índice de severidad de ausentismo          =   No. de días de ausencia      x  100

No. de trabajadores

= 2.565 x 100 = 461% 556

Por cada cien trabajadores que laboraron durante 2014, se perdieron 461 días por incapacidad, es decir, por cada trabajador se perdieron 4,6 días por incapacidad.

Discusión de resultados

En la literatura revisada sobre ausentismo de origen común, se encontró que las mujeres tienen más incapacidades que los hombres, lo cual fue corroborado en este estudio, pues las mujeres tienen 181% veces más probabilidad de incapacitarse que los hombres.

Al comparar los días perdidos por trabajador al año encontrados en (4,6) con los de los países mencionados en el contexto epidemiológico, se encuentra que son menores que los de Canadá (9 días) y los de varios países europeos (superior a 15 días), pero mayor que la de Estados Unidos (3 días).

En el contexto epidemiológico se hizo referencia a que las empresas privadas tienen un promedio menor de la duración de incapacidades (8,2 días) que las empresas públicas (12,9 días), lo cual concuerda con los hallazgos en este estudio.

Teniendo en cuenta el informe de condiciones de trabajo, respecto a los riesgos presentes en las diferentes locaciones, se pueden vincular determinadas características de éstos, con las patologías que generaron incapacidad:

  • Las lumbalgias que pesaron en las causas de ausentismo y las alteraciones de disco y lumbagos, entre otros, aprobadas en las mesas laborales, pueden tener relación con los riesgos biomecánicos de carga estática y dinámica.
  • Tanto en mesa laboral como en diagnósticos de ausentismo, se encuentra presente la ocurrencia de traumatismos diversos, que de alguna manera son consecuencia de riesgos de seguridad (locativos, accidentes, uso de equipos y herramientas).
  • En menor medida se reportaron alteraciones respiratorias (resfriado común), como diagnóstico de ausentismo, siendo este riesgo biológico común en los sitios de concentración (lugares de trabajo y reunión).

Conclusiones

  • Durante 2014 estuvieron incapacitadas 152 personas, con un reporte total de 298 incapacidades y 2.565 días perdidos (promedio de 8,6 días por incapacidad). 94% de las incapacidades se generaron a partir de una enfermedad común y 6% por accidente de trabajo.
  • La mitad de las incapacidades no superaron los cinco días en el mes. Al tener en cuenta sólo días hábiles, la mitad de las incapacidades no superaron tres días.
  • En tres grupos diagnósticos se concentran más de la mitad de las incapacidades temporales: alteraciones osteomusculares (20%), traumatismos (16%) y afecciones respiratorias (16%).
  • Se encontró asociación entre tener incapacidad y el género (las mujeres tienen más probabilidad de tener incapacidad que los hombres); también se encontró asociación con la ubicación (las personas de Bogotá tienen más probabilidad de tener incapacidad que las de fuera).
  • Por cada cien trabajadores que laboraron durante 2014 se presentaron 54 incapacidades y se perdieron 461 días por incapacidad, es decir que por trabajador se presentaron 0,5 incapacidades y se perdieron 4,6 días al año.

Agradecimientos

ARL Colmena.

PC Soluciones.

Equipo de Salud de la empresa donde se realizó el estudio.

Referencias bibliográficas

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MAZUERA, María Eugenia. Curso Modular de Epidemiología Básica. Medellín: L. Vieco e Hijas Ltda, 1998.

[1] COMISIÓN DE LAS COMUNIDADES EUROPEAS. Comunicación de la Comisión al Parlamento Europeo, al Consejo, al  Comité Económico y Social y al Comité de las Regiones. Bruselas, 2007.

[2] MARTÍNEZ, E. SALDARRIAGA, J. INACTIVIDAD FÍSICA Y AUSENTISMO EN EL ÁMBITO LABORAL. Revista Salud Pública 10(2), 2008.

[3] RIBAYA, F.J. LA GESTIÓN DEL ABSENTISMO LABORAL EN LA EMPRESA. Universidad de Alcalá, Madrid, 1995.

European Working Conditions Observator EWCO, Eurofound: Encuesta 2010.

[4] LIVANOS Y ZANGELIDIS. Sickness Absence: a Pan-European Study, 2010.

[5] DURÁN, J. Absence from work Spain. Eurofound, 2010.

[6] REID, Angus. KRONOS GLOBAL ABSENCE SURVEY, Canadá, 2012.

[7] OECD HEALTH DATA. Bajas laborales, 2012.

[8] AGULLÓ, E., BOADA, J.et al. EL ABSENTISMO LABORAL COMO CONSECUENTE DE VARIABLES ORGANIZACIONALES. Psicotherma, 2005.

[9] AMAT, Asociación de Mutuas de Accidentes de Trabajo. Incapacidad temporal por contingencias comunes, 2009.

[10] MESA, F, KAEMPFFER, A. 30 AÑOS DE ESTUDIO SOBRE AUSENTISMO LABORAL EN CHILE. Revista Médica de Chile, Vol 132, Nº 9, Santiago de Chile, 2004.

[11] PARADA, M, MORENO, R et al. AUSENTISMO LABORAL DE CAUSA MÉDICA, Revista Facultad de Medicina Universidad de los Andes. Vol 15 Mérida, Venezuela, 2006.

[12] MAZUERA, María Eugenia. Curso Modular de Epidemiología Básica. Medellín: L. Vieco e Hijas Ltda, 1998.

Silicosis: casos, estudio epidemiológico radiológico y presentación de una guía de actuación

Santiago Feliu No Comments

La silicosis pertenece al grupo de las neumoconiosis, que son enfermedades pulmonares ocasionadas por depósito de polvo inorgánico con una respuesta patológica asociada de tipo fibroso. Durante el año 2014 se evaluaron radiológicamente siguiendo los criterios de la Organización Internacional del Trabajo un total de 2340 trabajadores expuestos a sílice cristalina en España. De los casos estudiados 22 son positivos (1/1 0 mayor) de éstos un 25% trabajan en la industria extractiva y el 75% en las no extractivas. Un grupo de trabajo constituido en la Sociedad Vasca de Medicina del Trabajo y con la colaboración de expertos externos, realiza una síntesis de las guías y trabajos más relevantes, publicados en la literatura médica sobre silicosis y proponen una guía práctica para la vigilancia de la salud de los trabajadores expuestos a sílice cristalina. Se concluye que la silicosis sigue siendo una de las enfermedades profesionales más importantes con afectaciones graves para la salud de los trabajadores expuestos. En diversos países que utilizan chorro de arena mediante pistola a presión para aprestar tejidos principalmente los pantalones tipo «vaqueros» han aumentado las silicosis agudas (< 5 años de exposición) y aceleradas (5 y 10 años de exposición). Para evitar o minimizar al máximo la aparición de casos de silicosis debemos incidir en las medidas preventivas tanto en las colectivas (información, formación de los trabajadores), valoración higiénica de los diferentes puestos de trabajo como las medias individuales como serían los equipos de protección individual además de realizar la vigilancia de la salud específica a los trabajadores expuestos a sílice cristalina.Autor principal: 

Felipe IgnacioMartinez AlvarezUniversidad de BarcelonaChileCoautores: AnselmoLópez Guillen4 laboral advanced radiology. Sabadell (Barcelona)EspañaSergioRovira Sans4 laboral advanced radiology. Sabadell (Barcelona)EspañaMikelUña-GorospeDirector Médico CFP Servicio de Prevención. DonostiaEspañaGabrielMartí AmengualUnitat Docent de Medicina del Treball. Universitat de Barcelona.EspañaPereSanz-GallenUnitat Docent de Medicina del Treball. Universitat de Barcelona.España

Introduccion

Durante los últimos años se ha producido un aumento en la aparición de nuevos casos de silicosis. En nuestra opinión, son varios los factores que han contribuido a ello, siendo fundamentales el deficiente control y conocimiento de las propiedades de nuevos materiales de trabajo, con la consiguiente permisividad en el uso tanto en tareas nuevas como en su paso desde otras industrias en las que venían siendo aplicados, y todo ello habitualmente sin un eficiente control higiénico de esas condiciones. Así tenemos:

· El empleo del chorro de arena en la industria textil (“sandblasting” para apresto de la ropa vaquera; Akgun M et al, 2006)

  • La detección de nuevos focos de riesgo en actividades existentes:
  • Aparición de nuevos productos como los aglomerados de cuarzo (que contienen sílice cristalina en alto %), y su posterior uso masivo en el sector de la construcción (Martínez C et al, 2010; Pascual S et al, 2011; PérezAlonso A et al, 2014)
  • Infravaloración del riesgo potencial en actividades muy técnicas y supuestamente inocuas  como las de los Protésicos dentales (Uña Gorospe M, 2011).
  • El aumento de grandes construcciones de obra pública (ferrocarriles, autopistas) con la consiguiente movilización de enormes cantidades de tierra y perforación de túneles o a consecuencia de desastres naturales como las erupciones volcánicas con cenizas de alto contenido de cristobalita (Baxter PJ et al, 1999).

· Cierta “relajación” en el cumplimiento de las medidas de prevención.

La inexistencia de un tratamiento específico de la enfermedad obliga a focalizar las intervenciones al campo de la prevención. Estrictos controles ambientales del contenido en polvo de sílice del aire son imprescindibles, al igual que la detección precoz de los casos, de manera que pueda suprimirse la exposición ulterior en los pacientes con silicosis simple, y así disminuir la posibilidad de progresión a silicosis complicada.

Conceptos generales e históricos

El silicio es el segundo elemento más abundante de la corteza terrestre, después del oxígeno, y representa el 28% del total de la misma.

Sílice es el término genérico con el que se conoce al dióxido de silicio (SiO2). En estado libre se presenta en forma cristalina o amorfa, mientras que los silicatos son las formas combinadas. Las formas cristalinas (cuarzo, cristobalita y tridimita) son las que presentan mayor poder patógeno y entre ellas, el cuarzo es la más común en la naturaleza. La cristobalita y la tridimita se encuentran en rocas volcánicas.

La silicosis es la neumoconiosis causada por la inhalación de polvo de sílice cristalina. Excepcionalmente la exposición laboral a sílice amorfa, como la tierra de diatomeas (Mejías-Lozano P and Pérez-Ortiz E, 2010), puede ser causa de silicosis.

La presencia de silicosis se remonta, probablemente, a los orígenes del hombre, con la fabricación de utensilios y armas de rocas silíceas y sobre todo con la artesanía cerámica. PLINIO ya citaba los peligros de los mineros. A mediados del siglo XVI, AGRICOLA habla de los perniciosos efectos del polvo en los mineros en su obra De Re Metallica y RAMAZZINI en 1700 describe el deterioro de los pulmones de ciertos profesionales relacionadas con la inhalación de polvo de sílice. A mediados de siglo XIX, con el desarrollo industrial, aumento de la minería y las fundiciones a gran escala, comenzaron a aparecer casos de silicosis con gran incidencia, hasta que se pusieron en marcha las primeras medidas preventivas. “La cronología de este acontecer varía para cada país según el momento y evolución del desarrollo industrial, así como con la intensidad y el rigor en la aplicación de medidas preventivas” (Segarra Obiol F, 1985)

Riesgo silicógeno

Los trabajadores en riesgo de silicosis y que, en consecuencia, son tributarios de seguimiento específico serán aquellos que están expuestos a las sustancias, agentes y procesos que figuran en el apartado C: 1. a, c y d, 2, 3 y 4 del Cuadro de Enfermedades Profesionales (norma aprobada en España por Real Decreto 1299/2006, de 10 de noviembre), y que fundamentalmente son· Minas, túneles galerías y canteras · Trabajos en piedra (granito, pizarra, arenisca, etc.)· Abrasivos (chorro de arena, pulido, etc.)· Fundición (moldes)· Cerámica, porcelana, loza, carborundo y refractarios (trituración, pulido)· Cementos· Polvo de limpieza (polvos detergentes, etc.)· Pigmentos· Industria del vidrio· Otros (Al ser el silicio el segundo elemento, en cantidad, en la composición de la corteza terrestre, después del oxígeno, la silicosis puede presentarse en las situaciones más insospechadas).

En síntesis se pueden distinguir dos grandes grupos de industrias:

· Mineras

  • Extractivas (minas, canteras)
  • No extractivas (obras públicas, túneles, embalses…)

· Industrias “aplicadas” (trabajos de todo tipo realizados con materiales procedentes de la corteza terrestre)

Objetivos

Globalmente, conseguir, sino una erradicación de la silicosis, sí una drástica reducción en la aparición de nuevos casos, y detectarlos lo más precozmente posible para apartarlos del agente silicógeno. Todo ello es tarea de todos los implicados (empresarios, trabajadores, administraciones y organizaciones).

Para ello, es necesario conocer cuál es la situación actual y proponer unas medidas preventivas, de fácil adopción y realización en todos los ámbitos.

Nuestro trabajo consta de varios apartados que nos permitirían aproximarnos con rigor y cierta verosimilitud al problema:

  • 1. Conocer la Incidencia de la silicosis en España.
  • 2. Casos de silicosis “avanzada”, complicada, en trabajadores jóvenes
  • 3. Actualizar y explicar los aspectos relacionados con la prevención de los riesgos por exposición a sílice cristalina respirable

Metodologia

Durante el año 2014 hemos realizado un estudio radiológico en todo el territorio nacional peninsular, a trabajadores expuestos a polvo de sílice, con una unidad móvil de radiología, abarcando todo tipo de industrias y actividades, extractivas y aplicadas. Tanto la adquisición de las imágenes como la lectura de las mismas, se han realizado siguiendo las directrices de la ILO-Edición de 2011, revisada, en la que ya se contempla la radiología digital. Se ha valorado un total de 2340 trabajadores. La lectura de las radiografías se ha realizado por tres profesionales, dos radiólogos y un neumólogo con experiencia en neumología ocupacional. Y se han valorado todos los campos: Técnica radiológica, alteraciones parenquimatosas (forma y tamaño, profusión en doce categorías), pleurales, símbolos.

Como paradigmáticos de la trascendencia del problema, describimos dos casos de silicosis complicada (acelerada y crónica) en dos sujetos jóvenes, ambos trabajadores en marmolistería.

Por último aportamos una guía realizada por la Sociedad Vasca de Medicina del Trabajo en la que se recogen tanto las propuestas de vigilancia sanitaria realizadas a nivel de los diversos organismos técnicos responsables en el estado español hasta 2011, como los protocolos publicados por otros organismos internacionales hasta 2014.

Resultados

Resultados estudio radiológico de trabajadores expuestos a sílice en España

En las tablas I-III se reflejan el número de exploraciones, el tipo industrias donde se realizaron y los “casos” de silicosis que se encontraron.

Tabla I. TotalesINDUSTRIATOTAL EXP.EXP.CON ALT. (%)EXTRACTIVA108253 (4,9%)APLICADAS125844 (3,5%)TOTAL:234097 (4,1%)Tabla II. Ind. extractivasIND.EXTRACTIVATOTAL EXP.EXP.CON ALT. (%)A CIELO ABIERTO85031 (3,6%)SUBTERRANEA23222(9,5%)TOTAL108253(4,9%)Tabla III. Ind. AplicadasTipo indTOTAL EXPLEXP.CON ALT. (%)VIDRIO626 (10%)AZULEJO443 (7%)AGLOMERADOS36012 (3,3%)MARMOLERÍAS624 (2,5%)FUNDICIONES2787 (2,5%)MAT PRIMAS3446 (2%)OTRAS1086 (5,5%)TOTAL125844 (3,5%)

En la Tabla IV se especifica le profusión de todos los casos con lectura radiológica con anomalías.

Tabla IV. DISTRIBUCIÓN CASOS SEGÚN PROFUSIÓN
PROFUSION0/11/01/11/22/23/3 o compl
TOTAL44281841297
%452919412100

Comentarios

Si bien el número total de casos con anomalías radiológicas es del 4,1% de todos los explorados, la mayoría de los casos encontrados tienen una profusión 0/1 o 1/0, que suponen un 3% del total, por lo que el 1,1% restante corresponde a los trabajadores con profusión 1/1 o superior y que han de ser considerados silicóticos.

Esta incidencia ha de ser considerada con muchas reservas puesto que no podemos hacer una extrapolación directa a toda la población expuesta.

Casos clínicos. Silicosis complicada

Caso 1:- Silicosis acelerada

Varón de 34 años, no fumador, sin antecedentes médicos de interés, que desde hace 7 años trabaja como pulidor de mármol, granito y piedra artificial. Asintomático. La espirometría detecta un trastorno ventilatorio de tipo restrictivo y grado moderado, cuyos resultados son los siguientes: FVC de 3,44 L (61%), un FEVde 2,89 L/S (65%) y un Índice FEV/FVC (82%), el test broncodilatador sin cambios significativos. En las radiografías posteroanterior (Figura nº 1) y lateral de tórax se observan múltiples opacidades de contornos irregulares en los campos medios y superiores de ambos hemitórax. En el TAC torácico se observan múltiples imágenes pseudonodulares en ambos campos pulmonares superiores y en la língula, de distribución peribroncovascular. En el corte axial con ventana de partes blandas se observan adenopatías calcificadas hiliares y bilaterales en “cáscara de huevo” (Figura nº 2). Las concentraciones de sílice libre cristalina obtenidas en su puesto de trabajo, después de realizarse el diagnóstico de silicosis, son de 400 µg/m3 (VLA: 50 µg/m3).

Figura 1. Caso 1.- Radiografía PA. Múltiples opacidades de contornos irregulares en campos medios y superiores de ambos hemitórax.

Figura 2. Caso 1.- En el corte axial con ventana de partes blandas se observan adenopatías calcificadas hiliares y bilaterales en “cáscara de huevo” (ver flechas).

Caso 2.- Silicosis crónica

Varón de 38 años, no fumador, sin antecedentes médicos de interés desde hace 12 años trabaja como pulidor en una marmolería (mármol, granito y piedra artificial). Asintomático. En la radiografía de tórax se le diagnostica una silicosis complicada 2/3 q/p, con tendencia a la confluencia de imágenes, predominantemente en campo superior izquierdo (fig. 3, flecha), que se confirmó con  TAC torácica, como muestra la figura 4 (flechas).  Espirometría normal, La prueba de la ergometría da el siguiente resultado: Consumo de oxígeno al esfuerzo de 25,6 mL/Kg/min corresponde el 71% de su máximo teórico y la caída precoz en anaerobiosis al 38% del valor teórico de referencia el diagnóstico de la prueba es de un trastorno ventilatorio secundario a silicosis. El TAC torácico detecta conglomerados en ambos campos pulmonares con predominio izquierdo. Por tanto el paciente presenta una silicosis complicada con un trastorno ventilatorio secundario a dicha silicosis.

Figura 3.- Caso 2.- Rfía PA campos superiores

Figura 4.- Caso 2. Corte axial con ventana pulmonar de TAC torácica

Guía de vigilancia de la salud en los trabajadores expuestos al sílice

Un grupo de trabajo constituido en la Sociedad Vasca de Medicina del Trabajo y con la colaboración de expertos externos, finaliza en mayo de 2014 una síntesis de las guías y trabajos más relevantes, publicados en la literatura médica sobre silicosis y propone una guía práctica para la vigilancia de la salud de los trabajadores expuestos a sílice cristalina ( www.lmee-svmt.org/archivos/140619-Guia-Silice-castellano.pdf ).

Conclusiones

La silicosis sigue siendo una de las enfermedades profesionales más importantes con afectaciones graves para la salud de los trabajadores expuestos. La amplia utilización de la radial en la construcción y en empresas auxiliares principalmente en marmolerías ha aumentado la incidencia de la aparición de nuevos casos. En diversos países que utilizan chorro de arena mediante pistola a presión para aprestar tejidos principalmente los pantalones tipo “vaqueros” han aumentado las silicosis agudas (< 5 años de exposición) y aceleradas (5 y 10 años de exposición).

Para evitar o minimizar al máximo la aparición de casos de silicosis debemos incidir en las medidas preventivas fundamentalmente en las colectivas, con la información y formación de los trabajadores, y la valoración higiénica de los diferentes puestos de trabajo con su posterior control ambiental; como no hacer descuido de las medidas individuales como serían el uso de los equipos de protección individual además de realizar la vigilancia de la salud específica a los trabajadores expuestos al polvo de sílice cristalina.

Agradecimientos

Queremos agradecer de forma especial a los organizadores de este congreso que nos permiten compartir este estudio, que esperamos sea de utilidad para generar conocimiento en un tema de gran prevalencia tanto para España como en Chile.

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Papel del médico en el trabajo seguro en alturas

Santiago Feliu No Comments

Autor : 

Iván de JesúsArboledaAlcaldía de MedellínColombia

Introducción

El trabajo en alturas es una actividad crítica para el desarrollo económico del país, pues en múltiples sectores económicos se requiere esta actividad, la cual es difícilmente reemplazada por otro tipo de organización del trabajo; de ahí que estos trabajadores sean un recurso valioso para sus empleadores y para la sociedad, también el sector de la construcción es uno de los más importantes dinamizadores de la economía y cumple con una importante función social al generar gran demanda de empleo poco calificado.

Las caídas desde alturas es una de las principales causas de accidente de trabajo mortal (Reglamento de seguridad para protección contra caídas en trabajo en Alturas).

La normatividad le ha aclarado las reglas de juego para las actividades de seguridad industrial e ingeniería con la reglamentación de manuales técnicos, guías de protección contra caídas y la capacitación en competencias. Los médicos hemos visto como la reglamentación del trabajo en alturas ha tocado de forma muy tangencial las actividades de medicina laboral.

Los médicos laborales somos los llamados a darle el carácter técnico a nuestras evaluaciones ocupacionales y delimitar unos estándares como una línea de base mínima para poder tener un asidero que justifique y de objetividad a las decisiones que tomemos en el consultorio sobre aptitud o no, ya que con estas conductas limitamos derechos a los trabajadores.

Metodología

El siguiente artículo se desarrolla con base en una metodología documental mediante la recopilación y análisis diversas bases de datos para procurar fuentes bibliográficas con artículos de no más de 15 años de publicación

Se realizará una búsqueda en las bases de datos pubmed, google, además de la literatura impresa sobre el tema en las bibliotecas adscritas a la red g8 (eafit, escuela de ingeniería de Antioquia y facultad de minas de la universidad nacional), biblioteca politécnico Jaime Isaza Cadavid, fuentes de consulta del Sena regional Antioquia-choco.

Las palabras de búsqueda principalmente fueron: working height, aptitude work heights, evaluation work heights, risk assessment working at heights.

Evaluación del trabajador de alturas

Diabetes mellitus

El diagnóstico de diabetes insulino-dependiente o insulino-requirente es inhabilitante para el trabajo en alturas debido a la altísima frecuencia con la que esto pacientes presentan episodios de hipoglicemia sintomática, ya sea por falla en la dosificación o insuficiente ingesta de alimentos (Federal Aviation Administration, Guide for Aviation Medical Examiners)

No sucede así con los pacientes diabéticos tipo II controlados con hipoglicemiantes orales o dieta, sin embargo en estos pacientes se requiere certificar por el médico tratante la estabilidad de la enfermedad y la adhesión al tratamiento; en los trabajadores de alturas con diagnóstico de diabetes de novo debemos considerar una restricción parcial para realizar dicho trabajo durante los primeros tres meses, para controlarse y adaptarse al régimen terapéutico.

Patologías cardiovasculares

Arritmias

La presencia de alteraciones del ritmo o de la frecuencia cardiaca será motivo de no aptitud a menos que el médico especialista tratante certifique que dicha patología ha sido adecuadamente estudiada, con un diagnóstico definitivo y que con el tratamiento actual se halla en condiciones estables y sin exacerbaciones que requieran consulta urgente durante los últimos seis meses (Federal Aviation Administration, Guide for Aviation Medical Examiners).

Hipertensión arterial

El trabajador hipertenso no tendrá ningún impedimento si ha sido adecuadamente estudiado, tratado y controlado, de lo contrario este se debe aplazar.

Si durante el examen físico encontramos a un trabajador con alguna alteración significativa de la presión arterial hallándola inexplicablemente alta (mayor a160 mm/Hg la sistólicay100 mm/Hg la diastólica) se debe aplazar hasta que dicho hallazgo sea adecuadamente estudiado o estabilizado (Federal Aviation Administration, Guide for Aviation Medical Examiners), (Castan et al., 2004).

Enfermedad coronaria

La presencia de enfermedad coronaria e Intervenciones: Bypass de derivación coronaria, Angioplastia e inserción de un stent en un paciente candidato a trabajo en alturas debemos tener en cuenta que muchos de estos pacientes nunca podrán realizar este tipo de trabajo, requiriendo reubicaión laboral (Federal Aviation Administration, Guide for Aviation Medical Examiners), (Castan et al., 2004), (Aboa et al., 2007).

Valoración del riesgo cardiovascular para el trabajador de alturas

También se deben considerar de alto riesgo para realizar trabajo seguro en alturas a los trabajadores que sean evaluados mediante el sistema ATP III – Framingham y el puntaje resulte ser de un riesgo mayor al 20% en 10 años para enfermedad coronaria (Jiménez et al., 2008), Circulation 2002.

Patologías neurológicas

Restringen el trabajo en alturas todas aquellas patologías que generen déficit neurológico o sus secuelas que incluye parexias, parálisis, ataxia, perdida de capacidades cerebrales superiores, déficit visual o de otro sentido, igualmente las que presenten exacerbaciones recurrentes tales como convulsiones y vértigo o que produzcan alteraciones visuales o somnolencia que aparezcan como efecto adverso a los medicamentos neurológicos o siquiátricos (Federal Aviation Administration, Guide for Aviation Medical Examiners).

Trauma encéfalo craneano

El trabajo en alturas se restrinja durante los dos primeros años pos TEC, especialmente a aquellos pacientes que sufrieron traumatismos con las siguientes características:

-Traumatismo craneal moderado a severo.

-Hematoma Epidural o subdural.

-Déficit neurológico focal.

-Fractura de cráneo deprimida.

-Pérdida del conocimiento o desorientación por más de 1 hora pos TEC.

-Indicios de trauma de alta energía (Dreer et al., 2008).

El vértigo

La función vestibular merece especial mención y deberá ser exhaustivamente estudiada durante el examen de aptitud y ante el hallazgo de clínica sugestiva o de antecedentes patológicos de vestibulopatía periférica o central se procederá a restringir cualquier labor de alturas para estos trabajadores, hasta cuando se halla estudiado y manejado suficientemente por el especialista tratante(Ceballos et al., 2004), (Federal Aviation Administration, Guide for Aviation Medical Examiners).

Examen del equilibrio postural y exploración funcional otoneurológica

El equilibrio es producto de la retroalimentación de los sistemas somatosensorial/propiocepción, vestibular y visual. Los receptores visuales, propioceptivos y vestibulares proporcionan la información sobre la posición de la cabeza y el cuerpo en el espacio. Los diferentes sistemas pueden compensarse entre sí, de modo que la ausencia de una de las tres aferencias no conlleva la pérdida del equilibrio.

se ha podido demostrar los beneficios del examen clínico de la función otoneurológica frente a la evaluación instrumentada de los trastornos del equilibrio y de la patología vestibular, los trabajadores con alteración en su función vestibular deberían ser identificados con el interrogatorio y exploración física dada la alta sensibilidad de estos recursos (Díaz et al., 2008), (Ortuño et al., 2008).

Pruebas del equilibrio estático:

Tratan de poner de manifiesto el desequilibrio que se produce en ausencia de movimiento. (Ortuño et al., 2008).

-Prueba de Romberg

El médico Moritz Heinrich Romberg tras dedicarse al estudio de las enfermedades neurológicas describió en el siglo XIX el Test de Romberg, inicialmente para el diagnóstico del tabes dorsal.

El test de Romberg detecta alteraciones de la sensibilidad propioceptiva demostrando la pérdida del control postural en la oscuridad. La base del signo de Romberg es que si un paciente tiene perdida la sensibilidad propioceptiva, mantiene el equilibrio mientras persistan las otras dos aferencias, pero al privarle también de la aferencia visual el equilibrio se pierde (Pearce et al., 2005).

-Prueba de los índices de Barany

A comienzos del siglo XX el médico austriaco Robert Bárány fue galardonado con el Premio Nobel de Medicina por sus trabajos del aparato vestibular y su relación con el cerebelo. Como resultado de sus investigaciones describió varios signos y diseñó múltiples pruebas para el estudio del equilibrio, una de las más conocidas es la prueba de los índices de Barany.

Pruebas del equilibrio dinámico o de la marcha:

Tratan de poner de manifiesto el desequilibrio que se produce durante la marcha.

-Prueba de la marcha a ciegas o de Babinski-Weil

Es una prueba de equilibrio en la que se trata de poner de manifiesto las posibles alteraciones del desplazamiento del sujeto.

Con estas pruebas debe ser suficiente para identificar la indemnidad del equilibrio postural y de la función otoneurológica, o en caso contrario nos debe permitir clasificar el síndrome vestibular (Pearce et al., 2005).

Patologías osteomusculares:

Patologías o secuelas que produzcan  limitación de movimiento o disminución de la fuerza segmentaria en una  articulación importante, Serán condiciones incapacitantes para trabajo en alturas

Hernia de disco intervertebral debe contraindicar el trabajo en alturas cuando ya hay daño del anillo fibroso (Federal Aviation Administration, Guide for Aviation Medical Examiners).

Patologías de la audición

Es importante aclarar que las condiciones ORL que determinan restricción absoluta serian:

Hipoacusias Neurosensoriales que afecten severamente las frecuencias conversacionales (2000,1000, 500 Hz), Las pérdidas en las frecuencias más agudas solo si están asociadas a vértigo.

Una persona con solo acufenos y/o tinnitus SIN vértigo, y sin alteración auditiva, puede laborar en alturas (Federal Aviation Administration, Guide for Aviation Medical Examiners).

Patologías visuales

La evaluación de su capacidad visual, que permita establecer alteraciones de la agudeza visual (mayor de 20/30), del campo visual o alteraciones en la visión de profundidad, siempre y cuando no corrijan (Federal Aviation Administration, Guide for Aviation Medical Examiners), (Beltrán et al., 2012), (Bradford et al., 2005).

Patologías pulmonares y respiratorias

La Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC)

De acuerdo con la clasificación funcional de LCFA recomendada por la American Thoracic Society, se considera como deterioro grave cuando el valor de FEV1 se encuentra por debajo del 40 % del previsto (Federal Aviation Administration, Guide for Aviation Medical Examiners), (David et al., 2012).

El asma

No será apto el trabajador que presente exacerbación de los síntomas, requiera más de 3 medicamentos, usedosis altas de esteroides, o padezca asma inducida por el ejercicio (Federal Aviation Administration, Guide for Aviation Medical Examiners).

Peso y masa corporal

El peso limite máximo y mínimo para trabajar en alturas está determinado por múltiples variables:

Por debajo de 59 kg el absorbedor puede ser inefectivo, además trabajadores de talla tan pequeña pueden quedar insuficientemente sujetados por las riatas o correas del arnés.

El peso del trabajador (con todo y equipo) no debe sobrepasar los 90 Kg debido a la alta energía de arresto que con esta masa se alcanza, haciéndose mandatorio el utilizar siempre el absorbedor de energía por encima de este peso, al igual que los puntos de anclaje por debajo de la argolla dorsal, también es de esperar que trabajadores con extremidades de gran diámetro tengan dificultad para atarse las correas del arnés. Muchos arneses vienen certificados hasta 140 kg, cual no exime de medidas de precaución anteriores (M Olmo R Nave, Mecánica de la caída – HyperPhysics).

Pruebas complementarias de laboratorio clínico

Es el criterio del médico evaluador quien deberá definir la realización de exámenes complementarios o de evaluaciones especializadas para poder considerar la aptitud del trabajador:

Para todos los trabajadores que se evalúen para su certificación:

Glicemia, Hemoglobina y hematocrito para descartar anemia, se debe realizar adicionalmente, un examen de control de perfil lipídico, con el fin de tazar riesgo cardiovascular.

Casos especiales:

Para trabajadores mayores de 50 años de edad se recomienda la realización de un Electrocardiograma en reposo.

Por la prevalencia en nuestro medio del consumo de sustancias psicoactivas, es recomendable por las implicaciones de seguridad asociadas la realización de una prueba que permita establecer si el aspirante es un consumidor de sustancias psicoactivas.

Mujeres en edad fértil prueba de embarazo

Resultados

Evaluación del trabajador de alturas

El diabetes insulino-dependiente (tipo 1) o insulino-requirente (tipo 2) es inhabilitante para realizar trabajo en alturas. La diabetes tipo 2 no insulino requirente manejada con hipoglicemiantes orales y que el paciente este estable y compensado no tiene impedimentos.

La HTA y las arritmias no restringen el trabajo en alturas siempre y cuando estén estables, sin embargo la enfermedad coronaria siempre requerirá de autorización del cardiólogo tratante para permitirle trabajar en alturas.

Las enfermedades neurológicas de aparición súbita y que cursen con pérdida de la conciencia o del equilibrio contraindican el trabajo alturas.

Las lesiones osteomusculares que limiten severamente los arcos de movimiento o produzcan pérdida de fuerza segmentaria no son compatibles con el trabajo en alturas

Hipoacusias severas que afecten las frecuencias conversacionales tampoco podrán trabajar en alturas.

Por debajo de 59 kg el absorbedor puede ser inefectivo, además trabajadores de talla tan pequeña pueden quedar insuficientemente sujetados por las riatas o correas del arnés.

Con relación al peso del trabajador (con todo y equipo) no debe sobrepasar los 90 Kg ni ser inferior a los 59 kg

Conclusiones

Para que el trabajador tenga un desempeño seguro durante el trabajo en alturas se requiere garantizar que sus enfermedades de base están adecuadamente estudiadas, con un diagnóstico definitivo y que con el tratamiento actual se halla en condiciones estables y sin exacerbaciones que requieran consulta urgente durante los últimos meses, igualmente se debe tener en cuenta otros factores como medicamentos que ingiere regularmente y el peso del trabajador.

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LA CALIDAD DE VIDA EN EL TRABAJO DE ENFERMEROS DE UN HOSPITAL UNIVERSITARIO FEDERAL EN BRASIL

Santiago Feliu No Comments

Introducción:enfermeros actúan en condiciones que desde hace mucho tiempo han sido consideradas inadecuadas debido a las especificidades del ambiente y de las actividades insalubres por ellos ejecutadas.Objetivo: Analizar calidad de vida en el trabajo del enfermero en el contexto hospitalario.Metodología: Investigación cuantitativa, epidemiológica transversal. Lugar:UFRJ/Brasil. Muestra constituida por los enfermeros. Recolección de datos se utilizó un instrumento para medir la calidad de vida de los enfermeros en el ambiente hospitalario, validada por Carandina, D. M. (2003). Para el procesamiento de los datos cuantitativos se utilizó el SPSS. La investigación fue desarrollada de acuerdo con las directrices de la Resolución Nº 466/2012 del Consejo Nacional de Salud.Resultados:90% del género femenino; 96% tiene edad entre 36 y 65 años; 40% tiene ingresos mensuales entre 6 y 8 salarios mínimos. Demostración de satisfacción con las condiciones de trabajo: 72% demuestran mucha satisfacción por ser enfermeros, 52%, relación al salario y apoyo de las jefaturas de enfermería. Insatisfacción con las condiciones de trabajo: 72% con la seguridad en el lugar de trabajo y cantidad de profesionales de enfermeira, 80% con la falta de material. Importancia que los enfermeros dan a las condiciones de trabajo: 90% con la calidad de vida en el trabajo , 96% a la atención prestada a los pacientes y la propia profesión.Conclusión: los resultados demuestran la necesidad de valorizar los recursos humanos, desarrollando la conciencia de la necesidad de invertir en entrenamiento y calidad de vida en el trabajo. Se hace necesario mantener empleados sanos, motivados y calificados.

Autor principal: 

SheilaNascimento Pereira de FariasEscola de Enfermagem Anna Nery/ Universidade Federal do Rio de Janeiro/ BrasilBrasilCoautores: 

Anna Bianca Ribeiro MeloEscola de Enfermagem Anna Nery/ Universidade Federal do Rio de Janeiro/ BrasilBrasil

Maria Yvone Chaves MauroEscola de Enfermagem da Universidade Estadual do Rio de Janeiro/ BrasilBrasilCarla Christina Chaves MauroErgonomista e Eng. Segurança do Trabalho da M12 Ergonomia Arquitetura Design, Professor Colaborador da Universidade do Estado do Rio de Janeiro e Pós-gradução em Enfermagem do Trabalho da Universidade Gama Filho.BrasilIntroducción: 

Los enfermeros actúan en condiciones que desde hace mucho tiempo han sido consideradas inadecuadas debido a las especificidades del ambiente y de las actividades insalubres por ellos ejecutadas. El desgaste físico y emocional, la baja remuneración y el desprestigio social son factores asociados a las condiciones de su trabajo, que viene reflejando negativamente en la calidad de la asistencia prestada al cliente, llevando al abandono de la profesión y consecuentemente a la escasez de profesionales en el mercado de trabajo (por ejemplo, MARCITELLI CRA, 2011). La importancia de la satisfacción en el trabajo para el enfermero ha motivado estudios para evaluar e intentar responder cuestionamientos que involucran esa temática. De esta forma, utilizar indicadores para evaluar la calidad de vida del profesional enfermero en el trabajo pueden subsidiar resultados en la construcción de indicadores para evaluación de la calidad de la gestión de recursos humanos en enfermería (SIQUEIRA Y KURCGANT, 2012). Se necesitan políticas y programas institucionales que visen la calidad de vida en el trabajo de los profesionales de enfermería, preparando física y psíquicamente a los trabajadores, resultando en la mejora de la calidad de vida de los profesionales de enfermería y de la asistencia prestada, siendo fundamental la construcción de espacios para reflejar y planificar acciones adecuadas para atender las demandas referentes a la calidad de vida en el trabajo en el ambiente hospitalario (AMARAL JF et al, 2015). Objetivo: Analizar la calidad de vida en el trabajo del enfermero en el contexto hospitalario.Metodología: 

investigación cuantitativa, epidemiológica transversal. Lugar de la investigación: Hospital Universitario Federal ubicado en el Municipio de Río de Janeiro, Brasil. Población constituida por los enfermeros de la Institución. Para la recolección de datos se está utilizando un instrumento para medir la calidad de vida de los enfermeros en el ambiente hospitalario, versión reducida y validada por Carandina, M. A (2003). El concepto de calidad de vida en el trabajo medido por el instrumento se expresa como la percepción de satisfacción de los enfermeros con aspectos del trabajo que se consideran importantes para ellos. Para el procesamiento de los datos cuantitativos se está utilizando el software Statistical Package for the Social Sciences (SPSS). Se están realizando análisis uni, bi y multivariadas, además de regresión logística para pruebas de asociación. La investigación se desarrolla respetando las directrices de la Resolución n ° 466/2012 del Consejo Nacional de Salud, que trata de la investigación que involucra a los seres humanos.Resultados: 

En la muestra estudiada, 54% son enfermeros del servicio diurno, 12% del servicio nocturno, 30% diaristas y 4% jefes de sector; El 70% trabaja en la institución desde hace más de 20 años; El 90% son estatutarios federales; El 90% del género femenino; la edad media es de 44 años con DP de más o menos 10 años; 54% casados; El 60% sólo presenta un vínculo de empleo; 80% cumplen aproximadamente 30 horas de carga horaria semanal de trabajo; El 40% tiene ingresos mensuales entre 6 y 8 salarios mínimos y 34% entre 9 y 11 salarios mínimos; El 96% de la muestra posee post graduación, siendo que el 62% posee especialización. En cuanto a la demostración de satisfacción con las condiciones / situaciones de trabajo: 72% demuestran mucha satisfacción por ser enfermeros, 28% con la libertad de expresión de ideas, 36% con los beneficios que reciben, 52% con relación al salario y apoyo de las salidas jefes de enfermería, 58% con la comunicación con el equipo de enfermería. En cuanto a la demostración de insatisfacción con las condiciones de trabajo: 38% están insatisfechos con la calidad de vida en el trabajo, el 46% con las condiciones ergonómicas, el 72% con la seguridad en el lugar de trabajo y la cantidad de profesionales de enfermería, el 70% las condiciones de salubridad, el 80% con la falta de material, el 30% con la falta de autonomía, el 42% con la falta de incentivo para el estudio. En cuanto a la importancia que los enfermeros dan a las condiciones de trabajo: el 90% se importa mucho con la calidad de vida en el trabajo y el reconocimiento del equipo médico, el 88% con locales destinados a comidas y descanso, el 94% con las condiciones ergonómicas, de acuerdo con las normas institucionales, cantidad de material disponible y oportunidad para estudiar, 77% con el orden en el lugar de trabajo, 98% con la cantidad de personal de enfermería, autonomía en el trabajo y comunicación con el equipo de enfermería, posibilidad de ser oído, salario y beneficios, 92% con el apoyo de las jefaturas de enfermería y de los demás enfermeros, el 96% con la atención prestada a los pacientes y la propia profesión.Discusión de resultados: 

En este estudio, la muestra es predominantemente femenina corroborando con los datos de la literatura, que refieren que la fuerza de trabajo preferencial de la enfermería está compuesta por el sexo femenino. Es importante resaltar que el (des) valor de la profesión de Enfermería y el insuficiente reconocimiento por parte de la sociedad, está directamente relacionado a las cuestiones que dirigen sus prácticas a la idea de devoción, caridad y sumisión, teniendo en cuenta la cultura patriarcal en una perspectiva de trabajo en que el cuidado es un aspecto vinculado históricamente al femenino, las actividades de trabajo en enfermería están fuertemente vinculadas a él (SOUZA et al, 2015). Por tratarse de una institución pública federal es razonable comprender que gran parte de la muestra tiene más de 10 años de trabajo en el lugar y se resalta el elevado porcentaje de enfermeros mayores de 44 años ejerciendo actividad asistencial, lo que puede justificar los diversos problemas de salud de salud. Un estudio realizado en Alemania por Maatouk I et al (2018) con enfermeras mayores de 45 años tuvo como objetivo evaluar la eficacia de intervenciones que promueven envejecimiento saludable en enfermeros mayores con edad ≥45. Los resultados primarios fueron el bienestar relacionado con la salud mental y la calidad de vida relacionada con la salud mental. Los resultados secundarios incluyeron medidas relacionadas con la salud mental y el trabajo. La intervención basada en una teoría de envejecimiento saludable para enfermeros con edad ≥ 45 fue considerada eficaz en relación a mejoras en la calidad de vida relacionada con la salud psicológica y otros resultados relacionados con la salud mental. Los resultados demuestran la necesidad de valorizar los recursos humanos, que constituyen su principal patrimonio, desarrollando la conciencia de la necesidad de invertir en entrenamiento, calidad de vida en el trabajo, recursos materiales y humanos. Las Instituciones pueden colaborar con los liderazgos de enfermería para crear un ambiente que promueve comunicación eficaz y soporte emocional que conduzcan a un ambiente de trabajo más satisfactorio y promuevan cuidados de alta calidad para los pacientes y calidad de vida en el trabajo para el enfermero (SCRUTH et al. al 2018).Conclusiones: 

Se hace necesario mantener funcionarios sanos, motivados y calificados y de esta forma en el caso de la enfermería incorporando un carácter articulador e interactivo determinante del proceso de organización de servicios de salud y fundamental en la efectividad de políticas sociales y, en específico, las de salud.Referencias bibliográficas: 

AMARAL et al Calidad de vida en el trabajo de los profesionales de enfermería en ambiente hospitalario: una revisión integrativa Revista espacio para la salud, v.16, n.1, p.66-74, Londrina, ene / mar. 2015.

MARCITELLI C.R.A. Calidad de vida en el trabajo de los profesionales de la salud. Ensayo y Ciencias: Ciencias biológicas, agrarias y de salud. V.15, n.4, 2011.

MAATOUK I. et al Envejecimiento saludable en el trabajo: eficacia de las intervenciones grupales sobre la salud mental de las enfermeras mayores de 45 años: resultados de un ensayo aleatorizado y controlado. Más uno. 2018 19 de enero; 13 (1)

SCRUTH et al 2018 Calidad de vida laboral, entornos de trabajo saludables y retención de enfermeras Elizabeth Ann Scruth, PhD, MPH, CCNS, CCRN, FCCM n Sabrina Garcia, MSN, CNS y Liesel Buchner, RN, CCRN-K, CNMLwww.cns-journal.com May / Junio de 2018

SIQUEIRA V. T. A. E KURCGANT P.Satisfacción en el trabajo: indicador de calidad en la gestión de recursos humanos en enfermería Rev Esc Enferm USP, v.46, n.1, p. 151-157, 2012.

SOUZA l et al. Problematizaciones de géneros en el campo de la enfermería: diálogos con feminismos y la teoría queer Revista Nupem, Campo Mourão, v. 7, n. 13, jul./dez. 2015.


Fake News

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Son noticias, historias, artículos, etc. engañosas, creadas para desinformar deliberadamente o engañar al lector

¿Qué son las Fake News?

La era digital y las nuevas tecnologías de la información y la comunicación trajeron aparejados cambios y evoluciones tanto positivas como negativas. Una de las más perjudiciales para el periodismo fue el crecimiento de la difusión y propagación de Fake News (noticias falsas)

Definición

Las Fake News o noticias falsas, son noticias, historias, artículos, etc. engañosas, creadas para desinformar deliberadamente o engañar al lector. Suelen utilizarse para influir en las opiniones de los usuarios, marcar la agenda política o generar  desinformación, entre otras.

Las redes sociales han jugado un factor fundamental en la viralización de las fake news. Noticias, que además, pueden llegar de sitios webs, personas y hasta instituciones que a priori, generan confianza”.

El objetivo principal es el de presentar una información falsa como verdadera para poder, de esta manera, engañar, inducir a error, manipular decisiones personales, desprestigiar o enaltecer a una institución, entre otros propósitos.

Se presenta de manera distorsionada, utilizando fuentes falsas, sacando imágenes de contexto, utilizando  títulos escandalosos, entre otras maneras típicas.

En este contexto digital y ante esta situación de desinformación el Foro de Periodismo Argentino (FOPEA) lanzó 10 aspectos para observar y tomar en cuenta:

Otra de las organizaciones que tomó el tema fue la  Unesco (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura) que ha publicado un manual que tiene como objetivo ayudar a equipar el periodismo para hacer frente al “trastorno de la información”.

El libro, journalism,‘fake news’ & disinformation, nace en el contexto de la creciente preocupación internacional por una “guerra de desinformación”.


Fuentes:
Fopea
Arimetrics


Nueva Guía 2019 sobre Diabetes (ADA)

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La American Diabetes Association ha publicado su actualización anual: «Estándares de atención médica en la diabetes»

El documento, publicado en Diabetes Care, incluye todas las recomendaciones actuales de práctica clínica del grupo relacionadas con el tratamiento y la atención de la diabetes.

Cambios generales

El campo de la atención a la diabetes está cambiando rápidamente a medida que continúan surgiendo nuevas investigaciones, tecnologías y tratamientos que pueden mejorar la salud y el bienestar de las personas con diabetes. Con actualizaciones anuales desde 1989, la Asociación Americana de Diabetes (ADA) ha sido durante mucho tiempo un líder en la producción de pautas que capturan el estado más actual del campo.

Con ese fin, los «Estándares de atención médica en la diabetes» (Estándares de atención) ahora incluyen una sección dedicada a la tecnología de la diabetes, que contiene material preexistente que anteriormente se encontraba en otras secciones que se ha consolidado, así como nuevas recomendaciones.Aunque los niveles de evidencia para varias recomendaciones se han actualizado, estos cambios no se abordan a continuación, ya que las recomendaciones clínicas se han mantenido igual. Los cambios en el nivel de evidencia de, por ejemplo, E a C no se indican a continuación. Los Estándares de Atención 2019 contienen, además de muchos cambios menores que aclaran recomendaciones o reflejan nuevas pruebas, las siguientes revisiones más sustanciales.

Entre los cambios desde las recomendaciones del año pasado:Para los pacientes con diabetes tipo 2 que requieren un medicamento inyectable, se prefiere un agonista del receptor del péptido 1 similar al glucagón en lugar de la insulina.
 Para los pacientes con diabetes tipo 2 que no usan insulina, el autocontrol rutinario de la glucosa tiene un beneficio adicional limitado.
 El riesgo de enfermedad aterosclerótica a diez años (ASCVD, por sus siglas en inglés) debe ser parte de la evaluación de riesgo general del paciente.
 Se debe hacer hincapié en la ingesta de agua y se debe desalentar el consumo de bebidas endulzadas con azúcar y no edulcoradas.

Sección 1. Mejorar la atención y promover la salud en las poblaciones.

Se incluyó información adicional sobre los costos financieros de la diabetes para las personas y la sociedad.

Debido a que la telemedicina es un campo en crecimiento que puede aumentar el acceso a la atención para pacientes con diabetes, se agregó una discusión sobre su uso para facilitar la entrega remota de servicios relacionados con la salud e información clínica.

Sección 2. Clasificación y diagnóstico de la diabetes.

Sobre la base de los nuevos datos, los criterios para el diagnóstico de diabetes se cambiaron para incluir dos resultados de pruebas anormales de la misma muestra (es decir, glucosa en plasma en ayunas y A1C de la misma muestra).

Se identificaron condiciones adicionales que pueden afectar la precisión de la prueba A1C, incluido el período posparto.

CLASIFICACIÓNLa diabetes se puede clasificar en las siguientes categorías generales:Diabetes tipo 1 (debido a la destrucción autoinmune de las células β, que generalmente conduce a una deficiencia absoluta de insulina).
 Diabetes tipo 2 (debido a la pérdida progresiva de la secreción de insulina de las células β con frecuencia en el fondo de la resistencia a la insulina).
 Diabetes mellitus gestacional (GDM, por sus siglas en inglés) diabetes diagnosticada en el segundo o tercer trimestre del embarazo que no fue claramente evidente en la diabetes antes de la gestación.
 Tipos específicos de diabetes debido a otras causas, por ejemplo, síndromes de diabetes monogénica (como diabetes neonatal y diabetes de inicio en la madurez [MODY]), enfermedades del páncreas exocrino (como fibrosis quística y pancreatitis) y diabetes inducida por sustancias químicas (como con el uso de glucocorticoides, en el tratamiento del VIH / SIDA o después de un trasplante de órganos).

Sección 3. Prevención o retraso de la diabetes tipo 2

La sección de nutrición se actualizó para resaltar la importancia de la pérdida de peso para las personas con alto riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 que tienen sobrepeso u obesidad.

Debido a que fumar puede aumentar el riesgo de diabetes tipo 2, se agregó una sección sobre el uso y el abandono del tabaco.

NutriciónLa terapia de pérdida de peso conductual estructurada, que incluye un plan de comidas reducido en calorías y actividad física, es de suma importancia para las personas con alto riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 que tienen sobrepeso u obesidad.
 Debido a que la pérdida de peso mediante cambios en el estilo de vida solo puede ser difícil de mantener a largo plazo, las personas que reciben tratamiento con la terapia para perder peso deben tener acceso a apoyo continuo y opciones terapéuticas adicionales (como la farmacoterapia) si es necesario.
 Según los ensayos de intervención, los patrones de alimentación que pueden ser útiles para las personas con prediabetes incluyen un plan de alimentación mediterráneo y un plan de alimentación bajo en calorías y bajo en grasa.
 Se necesita investigación adicional sobre si un plan de alimentación bajo en carbohidratos es beneficioso para las personas con prediabetes.
 Además, la evidencia sugiere que la calidad general de los alimentos consumidos (según lo medido por el Índice de alimentación saludable alternativa), con un énfasis en los granos integrales, legumbres, nueces, frutas y verduras, y un mínimo de alimentos procesados ??y refinados, también es importante.
 Si bien deben fomentarse los patrones de alimentación saludables y bajos en calorías en general, también existe cierta evidencia de que determinados componentes de la dieta afectan el riesgo de diabetes en estudios observacionales.
 Un mayor consumo de frutos secos, bayas, yogur, café y té se asocia con un riesgo reducido de diabetes. Por el contrario, las carnes rojas y las bebidas azucaradas se asocian con un mayor riesgo de diabetes tipo 2.

Sección 4. Evaluación médica integral y evaluación de comorbilidades.

Sobre la base de un nuevo informe de consenso sobre la diabetes y el lenguaje, se agregó un nuevo texto para guiar el uso del lenguaje por parte de los profesionales de la salud para comunicar sobre la diabetes a personas con diabetes y audiencias profesionales en un estilo informativo, de empoderamiento y educativo.

Se agregó una nueva figura del informe de consenso de la Asociación Europea para el Estudio de la Diabetes (EASD, por sus siglas en inglés) sobre el ciclo de decisión de la atención de la diabetes para enfatizar la necesidad de una evaluación continua y una toma de decisiones compartida para alcanzar los objetivos de la atención de salud y evitar la inercia clínica.

Se agregó una nueva recomendación para destacar explícitamente la importancia del equipo de atención de la diabetes y para enumerar a los profesionales que conforman el equipo.

Se agregó una nueva tabla con los factores que aumentan el riesgo de hipoglucemia asociada al tratamiento.

Factores que aumentan el riesgo de hipoglucemia asociada al tratamiento     • Uso de insulina o secretagogos de insulina (sulfonilureas, meglitinidas).     • Deterioro de la función renal o hepática.     • Mayor duración de la diabetes.     • Fragilidad y edad avanzada.     • Deterioro cognitivo.     • Respuesta contrarreguladora deteriorada, desconocimiento de la hipoglucemia.     • Discapacidad física o intelectual que puede afectar la respuesta de comportamiento a la hipoglucemia.     • Uso de alcohol.     • Polifarmacia (especialmente inhibidores de la ECA, bloqueadores de los receptores de angiotensina, bloqueadores β no selectivos).

Se agregó una recomendación para incluir el riesgo de enfermedad cardiovascular aterosclerótica (ASCVD) de 10 años como parte de la evaluación general de riesgo.

La sección sobre la enfermedad del hígado graso se revisó para incluir un texto actualizado y una nueva recomendación sobre cuándo realizar una prueba para detectar una enfermedad hepática.


Ciclo de decisión para el tratamiento glucémico centrado en el paciente en la diabetes tipo 2. Adaptado de Davies et al. (119).

Inmunizaciones
Recomendaciones
Proporcionar las vacunas recomendadas rutinariamente para niños y adultos con diabetes por edad.
 Se recomienda la vacunación anual contra la influenza a todas las personas ≥6 meses de edad, especialmente a las personas con diabetes.
 Se recomienda la vacunación contra la enfermedad neumocócica, incluida la neumonía neumocócica, con la vacuna conjugada neumocócica de 13 valencias (PCV13) para niños antes de los 2 años. Las personas con diabetes de 2 a 64 años de edad también deben recibir la vacuna polisacárida neumocócica 23 valente (PPSV23). A la edad ≥65 años, independientemente de la historia de vacunación, es necesaria una vacunación adicional con PPSV23.
 Administre una serie de 2 o 3 dosis de vacuna contra la hepatitis B, dependiendo de la vacuna, para adultos no vacunados con diabetes de 18 a 59 años.
 Considere administrar series de 3 dosis de vacuna contra la hepatitis B a adultos no vacunados con diabetes de edades ≥60 años.
 Los niños y adultos con diabetes deben recibir las vacunas de acuerdo con las recomendaciones apropiadas para su edad.
 Las personas con diabetes tienen un mayor riesgo de infección por hepatitis B y son más propensas a desarrollar complicaciones a causa de la influenza y la enfermedad neumocócica. El Comité Asesor sobre Prácticas de Inmunización (ACIP) del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) recomienda la vacunación contra la influenza, el neumococo y la hepatitis B específicamente para las personas con diabetes.
 Las vacunas contra el tétanos, la difteria, la tos ferina, el sarampión, las paperas y la rubéola, el virus del papiloma humano y el herpes también son importantes para los adultos con diabetes, como lo son para la población general. 
CarbohidratosLos estudios que examinan la cantidad ideal de ingesta de carbohidratos para las personas con diabetes no son concluyentes, aunque controlar la ingesta de carbohidratos y considerar la respuesta de la glucosa en sangre a los carbohidratos de la dieta es clave para mejorar el control de la glucosa posprandial.La bibliografía sobre el índice glucémico y la carga glucémica en individuos con diabetes es compleja, ya que a menudo arroja resultados mixtos, aunque en algunos estudios, la reducción de la carga glucémica de los carbohidratos consumidos ha demostrado reducciones de A1C de 0,2% a 0,5% (84,85).Los estudios de más de 12 semanas no informan una influencia significativa del índice glucémico o la carga glucémica, independientemente de la pérdida de peso en A1C; sin embargo, se han informado resultados mixtos para los niveles de glucosa en ayunas y los niveles de insulina endógena.Para las personas con diabetes tipo 2 o prediabetes, los planes de alimentación bajos en carbohidratos muestran un potencial para mejorar la glucemia y los resultados de los lípidos hasta por 1 año.Parte del desafío en la interpretación de la investigación con bajo contenido de carbohidratos se debe a la amplia gama de definiciones para un plan de alimentación bajo en carbohidratos. Dado que los estudios de investigación sobre planes de alimentación bajos en carbohidratos generalmente indican desafíos con la sostenibilidad a largo plazo, es importante volver a evaluar e individualizar la orientación del plan de comidas regularmente para aquellos interesados ??en este enfoque.Los proveedores deben mantener una supervisión médica constante y reconocer que ciertos grupos no son apropiados para los planes de alimentación bajos en carbohidratos, incluidas las mujeres embarazadas o en período de lactancia, los niños y las personas que tienen una enfermedad renal o una conducta alimentaria desordenada, y estos planes deben usarse con precaución para aquellos que toman inhibidores de SGLT2 debido al riesgo potencial de cetoacidosis. Hay una investigación inadecuada sobre los patrones dietéticos para la diabetes tipo 1 para respaldar un plan de alimentación sobre otro en este momento.La mayoría de las personas con diabetes reportan una ingesta moderada de carbohidratos (44 a 46% de las calorías totales). Los esfuerzos para modificar los patrones de alimentación habituales a menudo no tienen éxito a largo plazo; Las personas generalmente regresan a su distribución habitual de macronutrientes.Por lo tanto, el enfoque recomendado es individualizar los planes de comidas para alcanzar los objetivos calóricos con una distribución de macronutrientes que sea más coherente con la ingesta habitual del individuo para aumentar la probabilidad de mantenimiento a largo plazo.Al igual que para todas las personas en los países desarrollados, se recomienda que tanto los niños como los adultos con diabetes minimicen la ingesta de carbohidratos refinados y azúcares agregados y, en su lugar, se centren en los carbohidratos de verduras, legumbres, frutas, lácteos (leche y yogur) y granos integrales.Se desaconseja encarecidamente el consumo de bebidas azucaradas (incluidos los jugos de frutas) y productos alimenticios procesados ??»bajos en grasa» o «sin grasa» con altas cantidades de granos refinados y azúcares añadidos.A las personas con diabetes tipo 1 o tipo 2 que reciben insulina a la hora de la comida se les debe ofrecer educación intensiva y continua sobre la necesidad de combinar la administración de insulina con la ingesta de carbohidratos.Para las personas cuyo horario de comidas o consumo de carbohidratos es variable, es importante el asesoramiento regular para ayudarles a comprender la compleja relación entre la ingesta de carbohidratos y las necesidades de insulina.Además, la educación sobre el uso de las proporciones de insulina a carbohidratos para la planificación de las comidas puede ayudarles a modificar efectivamente la dosis de insulina de una comida a otra y mejorar el control glucémico.Las personas que consumen comidas que contienen más proteínas y grasas de lo normal también deben realizar ajustes de la dosis de insulina a la hora de la comida para compensar el retraso de las excursiones glucémicas posprandiales. Para las personas con un horario fijo diario de insulina, la planificación de las comidas debe enfatizar un patrón de consumo de carbohidratos relativamente fijo con respecto al tiempo y la cantidad.

Sección 5. Gestión de estilo de vida

La evidencia continúa sugiriendo que no existe un porcentaje ideal de calorías provenientes de carbohidratos, proteínas y grasas para todas las personas con diabetes.

Por lo tanto, se agregó más discusión sobre la importancia de la distribución de macronutrientes basada en una evaluación individualizada de los patrones actuales de alimentación, las preferencias y los objetivos metabólicos.

Se agregaron consideraciones adicionales a las secciones de patrones de alimentación, distribución de macronutrientes y planificación de comidas para identificar mejor a los candidatos para los planes de comidas, específicamente para los patrones de alimentación bajos en carbohidratos y las personas embarazadas o en período de lactancia, que tienen o corren el riesgo de comer de forma desordenada, que tienen enfermedad renal y están tomando inhibidores del cotransportador de sodio-glucosa 2.

No existe un patrón de alimentación único para personas con diabetes, y la planificación de las comidas debe ser individualizada.

Se modificó una recomendación para alentar a las personas con diabetes a que disminuyan el consumo de bebidas endulzadas con azúcar y sin azúcar, y utilicen otras alternativas, con énfasis en la ingesta de agua.

La recomendación de consumo de sodio se modificó para eliminar la restricción adicional que estaba potencialmente indicada para las personas con diabetes e hipertensión.

Se agregó una discusión adicional a la sección de actividad física para incluir el beneficio de una variedad de actividades físicas de tiempo libre y ejercicios de flexibilidad y equilibrio.

La discusión sobre los cigarrillos electrónicos se amplió para incluir más sobre la percepción pública y cómo su uso para ayudar a dejar de fumar no fue más efectivo que la «atención habitual».

Objetivos de la terapia nutricional para adultos con diabetesPara promover y respaldar patrones de alimentación saludables, enfatizando una variedad de alimentos densos en nutrientes en porciones adecuadas, para mejorar la salud general y:Alcanzar y mantener las metas de peso corporal.
 Alcanzar objetivos glucémicos, de presión arterial y de lípidos individualizados
 Retrasar o prevenir las complicaciones de la diabetes.
 Para abordar las necesidades de nutrición individuales basadas en las preferencias personales y culturales, el conocimiento y la aritmética de la salud, el acceso a alimentos saludables, la disposición y la capacidad para realizar cambios de comportamiento y las barreras al cambio.
 Para mantener el placer de comer, proporcionando mensajes imparciales sobre la elección de alimentos.
 Proporcionar a una persona con diabetes las herramientas prácticas para desarrollar patrones de alimentación saludables en lugar de centrarse en macronutrientes, micronutrientes o alimentos individuales.

Sección 6. Objetivos glucémicos

Esta sección comienza ahora con una discusión de las pruebas A1C para resaltar la centralidad de las pruebas A1C en el manejo de la glucemia.

Para enfatizar que los riesgos y beneficios de los objetivos glucémicos pueden cambiar a medida que la diabetes avanza y los pacientes envejecen, se agregó una recomendación para reevaluar los objetivos glucémicos a lo largo del tiempo.

La sección se modificó para alinearse con las actualizaciones de los estándares de vida realizadas en abril de 2018 con respecto a la definición de consenso de hipoglucemia.

RecomendacionesRealice la prueba A1C al menos dos veces al año en pacientes que cumplen los objetivos del tratamiento (y que tienen un control glucémico estable).
 Realice la prueba A1C trimestralmente en pacientes cuya terapia haya cambiado o que no cumplan con los objetivos glucémicos.
  Las pruebas en el punto de atención para A1C brindan la oportunidad de cambios de tratamiento más oportunos.
Objetivos de Hb A1CRecomendacionesUn objetivo A1C razonable para muchos adultos no embarazados es <7%(53 mmol / mol).
 Los proveedores podrían sugerir razonablemente objetivos A1C más estrictos (como <6.5% [48 mmol / mol]) para pacientes individuales seleccionados si esto se puede lograr sin hipoglucemia significativa u otros efectos adversos del tratamiento (es decir, polifarmacia). Los pacientes apropiados podrían incluir a aquellos con diabetes de corta duración, diabetes tipo 2 tratada solo con estilo de vida o metformina, larga vida útil o sin enfermedad cardiovascular significativa.
 Los objetivos A1C menos estrictos (como <8% [64 mmol / mol]) pueden ser apropiados para pacientes con antecedentes de hipoglucemia severa, esperanza de vida limitada, complicaciones microvasculares o macrovasculares avanzadas, condiciones comórbidas extensas o diabetes de larga duración en quienes el objetivo es difícil de lograr a pesar de la educación para el autocontrol de la diabetes, el control adecuado de la glucosa y las dosis efectivas de múltiples agentes reductores de la glucosa, incluida la insulina.

Se muestran los factores del paciente y de la enfermedad utilizados para determinar los objetivos óptimos de A1C. Las características y problemas a la izquierda justifican esfuerzos más estrictos para reducir la A1C; los de la derecha sugieren esfuerzos menos estrictos. A1C 7% = 53 mmol / mol. Adaptado con permiso de Inzucchi et al.

Sección 7. Tecnología de la diabetes.

Esta nueva sección incluye nuevas recomendaciones, el autocontrol de la sección de glucosa en sangre que antes se incluía en la Sección 6 “Objetivos glucémicos” y una descripción de los dispositivos de administración de insulina (jeringas, bolígrafos y bombas de insulina), medidores de glucosa en sangre, monitores de glucosa continua ( En tiempo real y escaneado intermitentemente [«flash»]), y dispositivos automatizados de administración de insulina.

La recomendación de usar el autocontrol de la glucosa en sangre en personas que no usan insulina se cambió para reconocer que el monitoreo de glucosa de rutina tiene un beneficio clínico adicional limitado en esta población.

Sección 8. Manejo de la obesidad para el tratamiento de la diabetes tipo 2

Se modificó una recomendación para reconocer los beneficios del seguimiento del peso, la actividad, etc., en el contexto de lograr y mantener un peso saludable.

Se agregó una breve sección sobre dispositivos médicos para perder peso, que actualmente no se recomiendan debido a los datos limitados en personas con diabetes.

Las recomendaciones para la cirugía metabólica se modificaron para alinearse con las directrices recientes, citando la importancia de considerar las comorbilidades más allá de la diabetes al considerar la conveniencia de la cirugía metabólica para un paciente determinado.

Sección 9. Enfoques farmacológicos para el tratamiento glucémico

La sección sobre el tratamiento farmacológico de la diabetes tipo 2 se modificó significativamente para alinearse, según la actualización de los estándares de vida en octubre de 2018, con el informe de consenso de ADA-EASD sobre este tema, resumido en las nuevas.

Esto incluye la consideración de factores clave del paciente:

a) Comorbilidades importantes, como ASCVD, enfermedad renal crónica e insuficiencia cardíaca

b) Riesgo de hipoglucemia

c) Efectos sobre el peso corporal

d) Efectos secundarios

e) Costos

f) Preferencias del paciente .

Para alinearse con el informe de consenso ADA-EASD, se revisó el enfoque de la terapia con medicamentos inyectables.

Una recomendación de que, para la mayoría de los pacientes que necesitan la mayor eficacia de un medicamento inyectable, un agonista del receptor del péptido 1 similar al glucagón debería ser la primera opción, antes de la insulina.

Se agregó una nueva sección sobre la técnica de inyección de insulina, enfatizando la importancia de la técnica para la dosificación adecuada de insulina y evitar complicaciones (lipodistrofia, etc.).

La sección sobre tratamientos farmacológicos sin insulina para la diabetes tipo 1 se abrevió, ya que generalmente no se recomiendan.

Terapia inicial (Metformina)La metformina debe iniciarse en el momento en que se diagnostica la diabetes tipo 2 a menos que haya contraindicaciones.Para la mayoría de los pacientes, esto será monoterapia en combinación con modificaciones de estilo de vida. La metformina es eficaz y segura, es barata y puede reducir el riesgo de eventos cardiovasculares y la muerte. La metformina está disponible en forma de liberación inmediata para dosis dos veces al día o como una forma de liberación prolongada que se puede administrar una vez al día.En comparación con las sulfonilureas, la metformina como tratamiento de primera línea tiene efectos beneficiosos sobre la A1C, el peso y la mortalidad cardiovascular. Hay pocos datos sistemáticos disponibles para otros agentes orales como tratamiento inicial de la diabetes tipo 2.Los principales efectos secundarios de la metformina son la intolerancia gastrointestinal debido a la hinchazón, las molestias abdominales y la diarrea.El fármaco se elimina por filtración renal y los niveles circulantes muy altos (por ejemplo, como resultado de una sobredosis o insuficiencia renal aguda) se han asociado con acidosis láctica. Sin embargo, ahora se sabe que la aparición de esta complicación es muy rara, y la metformina puede usarse de manera segura en pacientes con tasas de filtración glomerular estimadas reducidas (eGFR); la FDA ha revisado la etiqueta de metformina para reflejar su seguridad en pacientes con eGFR ≥30 ml / min / 1.73 m2.Un ensayo aleatorizado reciente confirmó las observaciones previas de que el uso de metformina está asociado con la deficiencia de vitamina B12 y el empeoramiento de los síntomas de la neuropatía. Esto es compatible con un informe reciente del Estudio de Resultados del Programa de Prevención de la Diabetes (DPPOS) que sugiere pruebas periódicas de vitamina B12.En pacientes con contraindicaciones o intolerancia a la metformina, la terapia inicial debe basarse en factores del paciente; considere una droga de otra clase.Cuando A1C es ≥1.5% (12.5 mmol / mol) por encima del objetivo glucémico muchos pacientes requerirán una terapia de combinación dual para alcanzar su nivel A1C objetivo.InsulinaLa insulina tiene la ventaja de ser eficaz cuando otros agentes no lo son y debe considerarse como parte de cualquier régimen de combinación cuando la hiperglucemia es grave, especialmente si están presentes las características catabólicas (pérdida de peso, hipertrigliceridemia, cetosis).Considere iniciar el tratamiento con insulina cuando la glucosa en sangre sea ≥300 mg / dL (16.7 mmol / L) o A1C sea ≥10% (86 mmol / mol) o si el paciente tiene síntomas de hiperglucemia (es decir, poliuria o polidipsia), incluso en el momento del diagnóstico. o temprano en el curso del tratamiento. A medida que se resuelve la toxicidad de la glucosa, a menudo es posible simplificar el régimen y / o cambiar a agentes orales.

Sección 10. Enfermedades cardiovasculares y gestión de riesgos.

Por primera vez, esta sección está avalada por el American College of Cardiology. Se agregó texto adicional para reconocer la insuficiencia cardíaca como un tipo importante de enfermedad cardiovascular en personas con diabetes para tener en cuenta al determinar la atención óptima de la diabetes.

Las recomendaciones de presión arterial se modificaron para enfatizar la importancia de la individualización de los objetivos en función del riesgo cardiovascular.

Se incluyó una discusión sobre el uso apropiado de la calculadora de riesgo ASCVD, y se modificaron las recomendaciones para incluir la evaluación del riesgo ASCVD a 10 años como parte de la evaluación general del riesgo y para determinar los enfoques de tratamiento óptimo.

La recomendación y el texto sobre el uso de la aspirina en la prevención primaria se actualizaron con nuevos datos.

Para la alineación con el informe de consenso ADA-EASD, se agregaron dos recomendaciones para el uso de medicamentos que han demostrado un beneficio cardiovascular en personas con ASCVD, con y sin insuficiencia cardíaca.

Sección 11. Complicaciones microvasculares y cuidado de los pies.

Para alinearse con el informe de consenso de ADA-EASD, se agregó una recomendación para las personas con diabetes tipo 2 y enfermedad renal crónica para considerar agentes con beneficios comprobados con respecto a los resultados renales.

La recomendación sobre el uso de la telemedicina en el cribado de la retina se modificó para reconocer la utilidad de este enfoque, siempre que se realicen las referencias adecuadas para un examen ocular completo.

La gabapentina se agregó a la lista de agentes a ser considerados para el tratamiento del dolor neuropático en personas con diabetes en base a los datos sobre la eficacia y el potencial de ahorro de costos.

La sección de gastroparesia incluye una discusión de algunas modalidades de tratamiento adicionales.

La recomendación para los pacientes con diabetes de que se inspeccionen sus pies en cada visita se modificó para incluir solo a aquellos con alto riesgo de ulceración. Los exámenes anuales siguen siendo recomendados para todos.

Sección 12. Adultos mayores

Se agregó una nueva sección y una recomendación sobre el manejo del estilo de vida para abordar las necesidades y consideraciones únicas de la actividad física y nutricional para adultos mayores.

En la discusión sobre la terapia farmacológica, se introdujo la desintensificación de los regímenes de insulina para ayudar a simplificar el régimen de insulina para que coincida con las capacidades de autocontrol del individuo.

Se agregó una nueva figura que proporciona un camino para la simplificación. También se agregó una nueva tabla para ayudar a los proveedores de servicios a considerar la simplificación del régimen de medicamentos y la desinsensificación / deprescripción en adultos mayores con diabetes.

Sección 13. Niños y adolescentes

Se agregó un lenguaje introductorio al comienzo de esta sección para recordar al lector que la epidemiología, la fisiopatología, las consideraciones de desarrollo y la respuesta al tratamiento en la diabetes de inicio pediátrico son diferentes de la diabetes adulta, y que también existen diferencias en la atención recomendada para niños y adolescentes. con el tipo 1 en contraposición a la diabetes tipo 2.

Se agregó una recomendación para enfatizar la necesidad de realizar pruebas de detección de trastornos de la alimentación en jóvenes con diabetes tipo 1 a partir de los 10 a 12 años de edad.

Sobre la base de nuevas pruebas, se agregó una recomendación que desalienta el uso de cigarrillos electrónicos en los jóvenes.

La discusión sobre la diabetes tipo 2 en niños y adolescentes se amplió significativamente, con nuevas recomendaciones en varias áreas, que incluyen exámenes de detección y diagnóstico, manejo del estilo de vida, manejo farmacológico y transición de la atención a proveedores adultos.

Se agregaron nuevas secciones y / o recomendaciones para la diabetes tipo 2 en niños y adolescentes para objetivos glucémicos, cirugía metabólica, nefropatía, neuropatía, retinopatía, hígado graso no alcohólico, apnea obstructiva del sueño, síndrome de ovario poliquístico, enfermedad cardiovascular, dislipemia, pruebas de función cardíaca , y factores psicosociales.

Sección 14. Manejo de la diabetes en el embarazo

A las mujeres con diabetes preexistente ahora se les recomienda que su atención sea administrada en una clínica multidisciplinaria para mejorar la diabetes y los resultados del embarazo.

Se ha puesto mayor énfasis en el uso de la insulina como el medicamento preferido para tratar la hiperglucemia en la diabetes mellitus gestacional, ya que no atraviesa la placenta en una medida mensurable y la forma en que lametformina y la gliburida no deben utilizarse como agentes de primera línea, ya que ambos se cruzan la placenta y llegan al feto.

Sección 15. Atención de la diabetes en el hospital

Debido a su capacidad para mejorar las tasas de reingreso hospitalario y el costo de la atención, se agregó una nueva recomendación para que los proveedores consideren la posibilidad de consultar a un equipo especializado en el manejo de la diabetes o la diabetes cuando sea posible al atender a pacientes hospitalizados con diabetes.

Sección 16. Defensa de la diabetes

Se agregó a esta sección la declaración de ADA «Grupo de trabajo sobre acceso y asequibilidad a la insulina: conclusiones y recomendaciones». Publicada en 2018, esta declaración recopiló información pública y convocó una serie de reuniones con las partes interesadas a lo largo de la cadena de suministro de insulina para conocer cómo cada entidad afecta el costo de la insulina para el consumidor, un tema importante para la ADA y las personas que viven con diabetes.

les dejo el enlace colega solo en ingles.

http://care.diabetesjournals.org/content/42/Supplement_1


Los enfermeros piden que la OMS respalde su ratio máximo de pacientes

Santiago Feliu No Comments

Satse pide el respaldo a la Organización Mundial de la Salud a la Ley de Seguridad del Paciente

El Sindicato de Enfermería, Satse, ha pedido el respaldo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) a la Ley de Seguridad del Paciente que ha impulsado la organización sindical para establecer un número máximo de pacientes por cada enfermera o enfermero y así garantizar la seguridad asistencial en nuestro país.

El presidente de Satse, Manuel Cascos, se ha dirigido por escrito al director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom, para solicitarle una reunión y poder ofrecerle personalmente un pormenorizado detalle de la campaña “La Sanidad que merecemos. Ley de ratios enfermeras”, en la que se incluye la Iniciativa Legislativa Popular que espera que sea debatida en el Congreso de los Diputados en próximas fechas.

El Sindicato de Enfermería espera lograr el apoyo del máximo responsable de la Organización Mundial de la Salud una vez constatado su reiterado apoyo a la labor y competencias de las enfermeras y enfermeros de todo el mundo, así como su trabajo a favor de un mayor reconocimiento y presencia de estos profesionales en todos los sistemas sanitarios. Satse recuerda que la Organización Mundial de la Salud lleva desde hace años proponiendo a todos los países sucesivas estrategias de actuación global con el objetivo de fortalecer a las enfermeras y enfermeros en sus respectivos sistemas sanitarios desde el convencimiento de que su labor es fundamental para asegurar una óptima atención a los ciudadanos.

Informe

En concreto, en su informe “Orientaciones estratégicas globales para el fortalecimiento de la enfermería y la partería 2016-2020”, la OMS defiende la necesidad de contar con más enfermeras y enfermeros, poniendo especialénfasis en el continuo envejecimiento de la población y que, en la actualidad, la carga de la enfermedad es cada vez mayor y más compleja, apunta la organización sindical
La petición de reunión con el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS) es una más de las previstas por el Sindicato de Enfermería para lograr el mayor número posible de apoyos institucionales, políticos, profesionales y sociales a su iniciativa de dotar a todas la plantillas de Enfermería del número suficiente de profesionales.

Menor carga y mayor seguridad

Las reuniones con responsables de organizaciones políticas, profesionales y de pacientes, consumidores y ciudadanos a nivel internacional y nacional vienen motivadas porque la Ley impulsada por el Sindicato beneficiará tanto a los pacientes, porque recibirán una atención más segura y de mayor calidad, como a los profesionales, porque trabajarán con una menor carga laboral, lo que repercutirá positivamente en su salud y seguridad en el trabajo, y al sistema sanitario español en su conjunto, ya que resultará más eficiente y económico.
En fechas recientes, la Confederación Europea de Sindicatos Independientes (CESI) ya tuvo conocimiento de la iniciativa de Satse y mostró su total apoyo a la misma al coincidir en la importancia de defender y mejorar los sistemas sanitarios públicos europeos, y, en el caso del español, aumentar el número de enfermeras y enfermeros para igualarnos, al menos, a la media europea.
España se encuentra en el puesto 24 de los 28 países de la Unión Europea, al contar con una ratio de 5,3 enfermeras y enfermeros por 1.000 habitantes, mientras que la media europea es 8,8 enfermeras y enfermeros por 1.000 habitantes, concluye el Sindicato de Enfermería.