Utilizar el marco de enfermería basada en la evidencia para fomentar el uso de la investigación, el planteamiento de nuevos proyectos,prácticas de enfermería, desarrollos de políticas y problemas profesionales
Directora de la carrera de Enfermería de la Facultad de Ciencias Biomédicas de la Universidad Austral
Hace unos días, la Ciudad de Buenos Aires aprobó el marco normativo para las relaciones entre CABA y los profesionales de su Sistema Público de Salud, en la que se excluye a los Licenciados en Enfermería.
No se entienden las razones de esta exclusión. Numerosas organizaciones nacionales e internacionales, sociedades científicas y asociaciones de profesionales, han expresado su disconformidad con esta nueva ley que atenta contra quienes son, en palabras del Director General de la Organización Mundial de la Salud (OMS) “la columna vertebral del sistema de salud”.
Esta sanción se da en contradicción con el reconocimiento de la carrera de Licenciatura en Enfermería como carrera de riesgo público dado en el año 2013, por el que se la incorpora al art. 43 de la Ley de Educación Superior (N° 24521). Esta incorporación supone que las carreras de Licenciatura en Enfermería deben ser acreditadas periódicamente por la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (CONEAU) y busca promover una mayor calidad de la formación universitaria de estos actores esenciales del sistema de salud.
Actualmente, el primer proceso de acreditación de la carrera de Licenciatura en Enfermería está llegando a su fin. Ha supuesto, además, un gran desafío institucional así como también una oportunidad de crecimiento, desarrollo y mejora; que se ha vivido con el espíritu de estar contribuyendo a la mejora de la calidad educativa de los futuros profesionales.
Garantizar una educación universitaria de calidad resulta una estrategia adecuada para contribuir al logro de las metas de salud y objetivos de desarrollo sostenible. Sin embargo, parecería que no es suficiente. La OMS considera que los conocimientos, las aptitudes y la motivación de los recursos humanos resultan imprescindibles para el logro de la salud de la población (2014). Es decir que, el compromiso con la calidad de la formación debe estar acompañado por políticas que promuevan el desarrollo de la profesión, faciliten la formación continua y favorezcan la motivación y retención de sus profesionales.
Actualmente, existen numerosas iniciativas regionales y mundiales para empoderar a los profesionales de enfermería. Este año, la OMS en colaboración con el Consejo Internacional de Enfermeras (CIE) lanzó la campaña global “Nursing now” con el objetivo de concientizar a la población sobre el estado de la enfermería y fortalecer la profesión en las diferentes regiones del mundo. El eje central de la campaña consiste en el empoderamiento de los profesionales de enfermería y su inclusión en la toma de decisiones de salud a nivel nacional y mundial.
Resulta lamentable que en un país en el que se ha decidido evaluar la calidad de la formación universitaria de los Licenciados en Enfermería, al mismo tiempo, no se los reconozca como “profesionales de la salud” en la Ciudad de Buenos Aires. Frente ambas circunstancias, se plantea un escenario de enorme contradicción. ¿Cuál es el reconocimiento que deberían tener los Licenciados en Enfermería en nuestro país? Cabe recordar que el personal de enfermería representa el mayor porcentaje de los trabajadores sanitarios. El envejecimiento de la población y la prevalencia de las enfermedades crónicas describen la realidad de la salud de la población y, por tanto, la creciente demanda de estos profesionales.
Sin embargo, nuestro país tiene la menor cantidad de profesionales de enfermería de la región (4,24/10.000 habitantes) junto con Honduras, República Dominicana y Haití. En función de este escenario, la situación nacional es dramática y reclama nuevas estrategias. Este miércoles 21 de noviembre, en el Día Nacional de la Enfermería, reafirmemos nuestro compromiso con la profesión y renovemos nuestra responsabilidad con la salud y el cuidado de toda la población.
ÁNGEL M. GREGORIS.- La disfagia orofaríngea está provocada por determinadas afecciones que debilitan los músculos de la garganta e impiden a los alimentos que pasen de la boca a la garganta y al esófago. La formación de los profesionales resulta imprescindible a la hora de saber abordar esta situación y también para educar a los afectados y cuidadores principales para que sepan enfrentarse a este problema. Con el objetivo de formar a los estudiantes de enfermería, desde el centro sociosanitario Pere Virgili, de Barcelona, y la Universidad Internacional de Cataluña se puso en marcha una iniciativa de colaboración en la que se buscaba explicar a los estudiantes nuevos roles de autonomía para que diesen conocimientos al paciente, a la familia, a los cuidadores y a la comunidad y así empoderarlos en el cuidado de la broncoaspiración en pacientes con disfagia orofaringea.
El proyecto, que ha sido presentado en forma de comunicación en el Congreso de la Asociación de Enfermería Comunitaria bajo el título Educación para la salud: una estrategia para mejorar el cuidado de la disfagia orofaringea, buscaba ver el nivel de conocimientos que tenía la población sobre esto y tras analizar los resultados se ha comprobado que una intervención en este sentido mejora y mucho la calidad de vida de los pacientes, a la vez que mejora también la satisfacción de los usuarios conocer que hay alguien que se puede dedicar a atender este desconocimiento.
“Hacemos una educación higiénico-educativa, les explicamos la maniobra de seguridad de la cabeza a la hora de alimentar a la persona, cómo lo tienen que hacer, qué texturas hay que modificar, cómo se utilizan… y luego las medidas higienicobucales de la persona que se está alimentando”, explica Ana Ayuste, enfermera del centro Pere Virgili y tutora clínica de la Universidad Internacional de Cataluña.
Para ella, es importante que este trabajo se conozca porque “la disfagia orofaringea es muy desconocida, la población anciana va aumentando y tenemos muchas enfermedades en las que al avanzar degenerarán en un 80% en este problema”. “Prevenir los episodios de broncoaspiración hará que el paciente viva con mejor calidad de vida, con menos ingresos hospitalarios y con mejor salud. A la vez, el impacto que tiene el cuidador y la seguridad de saber cómo tiene que atender a un ser querido también les disminuye el estrés”, apunta Ayuste.
Los enfermeros perfusionistas intervienen en cirugías que requieran vaciar el corazón u operar con el pulmón parado. Sin embargo, su labor no es del todo conocida. Por ello, el nuevo número de la revista Enfermería Facultativa muestra cómo la labor de estos profesionales.
Y además:
-Constantes vitales: Un trabajo poco conocido. -Los partos en casa sin matrona, una amenaza para la vida de las embarazadas y sus bebés. -Enfermeras y pacientes ostomizados demandan baños públicos adaptados. -Una unidad de enfermeras para atención al paciente hematológico de alto riesgo. -La micropigmentación, una técnica que mejora la vida tras el cáncer de mama. -Relatos en primera persona de cómo se vive en la UCI. -Los pacientes reclaman un Plan Nacional de Humanización.
Enfermería Facultativa es mucho más: Viajes, Ocio, Cine, Tecnología, Solidaridad.
ALICIA ALMENDROS.- Evaluar los efectos de la implantación de recomendaciones basadas en la evidencia en los resultados de salud de los pacientes y en la mejora de la calidad de los cuidados de salud es el objetivo del proyecto Sumamos Excelencia. Una iniciativa en la que participa el Hospital Universitario de Móstoles. “Se trata de un proyecto a nivel nacional que ha impulsado la dirección del hospital. A través de la unidad de apoyo de investigación del propio hospital se ha acercado este proyecto a los trabajadores y a las propias unidades del centro. Y nuestro servicio, anestesia y reanimación, ha participado en el área temática de control y manejo del dolor. Es importante incorporar la evidencia científica a nuestra práctica diaria clínica porque estamos actualizando continuamente los conocimientos y habilidades técnicas en nuestro día a día y así disminuimos la variabilidad entre profesionales y unificamos criterios”, argumenta M.ª Ángeles Merchán, enfermera de Anestesia y Reanimación del Hospital Universitario de Móstoles.
Temáticas
Incontinencia urinaria, caídas y dolor son las tres temáticas en las que se lleva a cabo este programa. Al unirse, las unidades participantes se comprometen a realizar una formación acerca del proceso de implantación de buenas prácticas, a llevar a cabo una medición basal de los indicadores preestablecidos según el área seleccionada, a implantar las recomendaciones y a realizar mediciones de seguimiento a los tres, seis, nueve y doce meses. Los datos se obtienen de las historias clínicas y de los registros clínicos por los investigadores responsables de cada unidad y son volcados en una plataforma online disponible para el proyecto.
Enfermeras
El dolor es la quinta constante vital y para la enfermería es clave trabajar teniéndolo en cuenta. “Hemos desarrollado una herramienta adaptada a las condiciones que teníamos dentro del servicio que nos sirve para registrar el dolor específico en nuestra unidad. Una vez creada la herramienta se realiza una auditoría y un seguimiento de ese registro del dolor en diferentes momentos secuenciales que el paciente va desarrollando en su ingreso”, resalta Merchán. “Y, estas auditorías nos demostraron la importancia de monitorizar el dolor desde reanimación hasta las áreas de hospitalización para poder hacer ese seguimiento del mismo”, añade.
Una vez salen de la unidad de reanimación llegan a planta donde la enfermera continúa con el seguimiento. “Según llegan a planta vemos cuáles son los pacientes a los que tenemos que observar. Registramos los nuevos y analizamos las últimas 24 horas de los que llevan más tiempo. Nos ponemos en contacto con todos los pacientes y les explicamos el dispositivo que llevan para el manejo del dolor y de alguna forma les tranquilizamos haciéndole saber que vamos a ser nosotras las que les llevemos el control durante su ingreso en la unidad. Que estamos a pie de cama, tenemos tiempo para dedicarles, para hablar y, sobre todo, vamos viendo cómo van evolucionando y les transmitimos esa información a los anestesistas que en definitiva son los que van a modificar tratamiento y a tomar las decisiones”, puntualiza Gascó.
Ventajas
Y es que los beneficios son muchos: aprender una metodología de implantación de buenas prácticas, adecuar la práctica clínica a las recomendaciones basadas en la evidencia y mejora de los resultaos de salud de los pacientes y la calidad de los cuidados, disminuir la variabilidad ya que todos los participantes implantarán las mismas recomendaciones, formar parte de una red de excelencia de cuidados y recibir feedback periódico de los avances obtenidos con la implantación, de modo individual y del proyecto global, para poder realizar una comparación de la situación de cada unidad.
DAVID RUIPÉREZ.- Los profesores Adolfo Romero Ruiz y el Juan Gómez Salgado, doctores universitarios y enfermeros, impulsan la investigación en Enfermería y en otros campos sanitarios desde el Máster en Metodología de la Investigación en Ciencias de la Salud que ofrece la Universidad de Huelva. En un momento en el que la investigación por parte de los profesionales de enfermería está más viva que nunca, analizan los retos y dificultades que todavía existen al adentrarse en este terreno y las claves para llegar a ver publicada una investigación enfermera en una revista de alto impacto científico.
¿Qué tres cualidades debe poseer un buen enfermero investigador?
Juan Gómez (JG): La primera, sin lugar a dudas, la curiosidad. La segunda, la constancia. La tercera, y no menos importante, la preparación.
¿Prepara el Grado a las enfermeras para lanzarse a investigar con garantías?
Adolfo Romero (AR): La preparación de las recién egresadas depende de cada facultad, porque hay diferencias en los programas. No obstante, el nivel no suele ser elevado, porque la orientación del alumno suele ser clínica y no se interesa tanto por los temas relacionados con la investigación. Eso ocurre, normalmente, más adelante.
¿Deberían concederse horas de la jornada laboral para investigar?
AR: Es imprescindible. Si realizas una investigación, siempre ha de estar relacionada con tu actividad asistencial; de no ser así no tendría sentido. Por ello es preciso disponer de apoyo de las instituciones (soporte técnico,metodológico, suplencias…) para poder realizar estos proyectos con garantía de éxito. Hay una figura muy interesante, la Intensificación Investigadora, que hasta hace unos años era reglamentada directamente por los servicios centrales y el instituto de salud Carlos III, gracias a la cual era posible conseguir un contrato al 50% para liberar al investigador.
JG: Desgraciadamente, ahora es un aspecto gestionado por los responsables de las UGC y los institutos gestores de la investigación, lo que ha puesto en desventaja a nuestro colectivo, ya que existen muy pocos grupos consolidados de investigación en enfermería.
“Cada vez tienen más peso los estudios con intervención frente a los descriptivos”“Cada vez tienen más peso los estudios con intervención frente a los descriptivos”
¿Hay miedo a publicar en revistas científicas de impacto? ¿Son los enfermeros timoratos o fatos de confianza en este sentido o son las revistas las que vetaría un artículo con un enfermero como investigador principal?
AR: El principal hándicap es el inglés, ya que estamos muy poco por no decir nada, habituados a escribir en este idioma, Las revistas de impacto de enfermería (o sea, las incluidas en el catálogo de Clarivate Analytics) están todas en lengua inglesa. Así que más que miedo, diría excesivo respeto y desconocimiento del inglés. Aunque las generaciones futuras tienen controlado este aspecto, por lo que soy optimista. Yo personalmente no he tenido problemas para publicar en este tipo de revistas siendo enfermero y primer autor.
¿Qué áreas de la enfermería son las más prolíficas en materia de investigación?
AR: Los cuidados son un área de conocimiento con un amplio catálogo de posibilidades. Quizá los campos más explorados sean las úlceras por presión y los pacientes crónicos, con diferentes abordajes. En cuanto a metodología, durante mucho tiempo han prevalecido los estudios descriptivos, pero cada vez más se ven publicados estudios con intervención.
JG: Este cambio es a su vez potenciado por las revistas científicas que cada vez más priorizan para ser publicados los estudios con intervención frente a los descriptivos.
¿Qué conocimientos se pueden adquirir en un máster de investigación?
AR: Un máster enfocado en la metodología de la investigación puede proporcionar todas las herramientas necesarias para llevar a cabo un proyecto de investigación, salvo la experiencia, claro está.
JG: Disponer de ese arsenal de conocimientos sitúa a las enfermeras en un lugar privilegiado, con habilidades imprescindibles no solo para conocer la metodología, sino para estar preparados para intentar acceder a subvenciones que faciliten nuestra actividad investigadora, que es otro de los problemas que solemos encontrarnos.
D.RUIPEREZ/G. ROMERO.- Victoria González es noticia por haber roto un techo de cristal más en la historia de la enfermería pues es la primera vez en nuestro país que una mujer alcanza el rango de comandante dentro del escalafón de la enfermería militar. Y no ha sido un camino de rosas: le ha costado 30 años ascender, cuando otros compañeros de la sanidad militar lo hacen en apenas 10 años. Con una larga trayectoria profesional en el ámbito de la docencia, actualmente está destinada en la Inspección General de Sanidad.
¿Qué sientes al ser la primera mujer comandante, una mujer que ha hecho historia?
Es una gran responsabilidad. El haber llegado a comandante para mí es todo un orgullo y satisfacción. Al llegar a comandante de alguna manera te sientes premiada por tu trayectoria profesional, ya que es el primer empleo en el que te sometes a un proceso de evaluación para clasificarte y en función de esa clasificación asciendes si queda vacante.
¿Por qué a ti te ha costado tanto ascender?
Nuestra escala es un poco diferente, estamos en la Escala de Oficiales Enfermeros, dentro del Cuerpo Militar de Sanidad. Tenemos un régimen de escala y empleos diferentes a la del resto nuestros compañeros de sanidad. Esto se determinó así en la Ley del régimen del personal militar, del año 2007, que es la que actualmente está en vigor.
30 años para ascender, se os impide llegar a general… me parece una discriminación
Nos regimos por la ley 39/2007, de 19 de noviembre, que es la que regula el régimen de personal. Entiendo que el legislador consideró que hasta 2012 no se consolidaba, teóricamente, la nueva ordenación de las titulaciones en grado, máster y doctorado. Sí que es verdad que se redacta una disposición final que cuando se termine ese proceso de conformación de las titulaciones y una serie de requisitos… se instaría al Gobierno para que hiciese una ley para la sanidad militar donde nosotros sí entendimos que se resolvería este tema. Nosotros constantemente informamos de esta situación, que creemos que, en no mucho tiempo, tiene que cambiar. Aunque es verdad que vamos un poquito lentos, también lo es que estamos en un punto sin retorno. Somos grado universitario y eso se va a tener que reflejar en la normativa, le pese a quien le pese.
La enfermería civil en España está a la vanguardia internacional, ¿sucede también con otros ejércitos?
Nuestra enfermería está muy avanzada. No contamos con las especialidades de la vida civil, pero tenemos una propia: la de enfermería médico-quirúrgica en operaciones. Está enfocada a una de nuestras estructuras sanitarias con capacidad ROLE 2, que es donde hay quirófano. Tenemos una formación tan potente que somos capaces de actuar en cualquiera de los campos. En otros países vemos que están más especializados, pero nosotros no. Sin embargo, vamos por ese camino, queremos especializarnos, y yo creo que nuestras autoridades sanitarias dentro del Ministerio de Defensa lo están entendiendo.
Por otro lado, en la enfermería militar tenemos unas connotaciones diferentes a la del resto de la sociedad. Muchas veces estamos sometidos a un factor de aislamiento, estamos solos ante las situaciones, bien por que estemos en una operación y así lo requiere, o estás en un buque y no tienes ni siquiera comunicaciones. Hay muchas situaciones en las que nosotros nos vemos obligados a actuar solos.
Eso os ha generado muchos problemas con el anterior decreto de prescripción enfermera…
Ha sido un gran problema para nosotros, porque andábamos en el borde de la inseguridad jurídica. Para nosotros ha sido muy costoso todos estos años con esos límites tan estrictos. Nos hemos visto en una situación muy comprometida. Ahora mismo eso parece que ya está resuelto. El Real Decreto, por nuestras circunstancias, nos habilita para tener nuestra propia normativa en este campo, porque tiene que reconocer el Ministerio de Sanidad que nosotros tenemos unas connotaciones muy diferentes.
¿Qué otros problemas conlleva la enfermería militar?
Realmente tenemos los mismos problemas que en la sociedad civil. Se ve todavía como una profesión tutelada por el médico donde la visibilidad de la enfermería, igual que en el resto sociedad, pero no es en España sino a nivel mundial, a la profesión le falta visibilidad, empoderamiento. ¿Tal vez es también es un problema de género? Quizá sí.
¿Qué alicientes supone ejercer como enfermero militar?
Somos un colectivo dentro de las Fuerzas Armadas con una tremenda vocación de servicio. Yo siempre digo que es una vocación de servicio al cuadrado, porque tenemos por un lado la vocación inherente a nuestra vocación, y también la vocación de servicio de las Fuerzas Armadas, que es muy potente. Nunca sabemos muy bien si somos antes militares o enfermeros. Ahí estamos y vamos a estar donde nos toque estar, pero cumpliendo nuestra misión.
Nuestro campo de actuación es muy diferente al resto. Tiene muchísimas ventajas. Además, tienes la oportunidad de conocer una gran variedad de situaciones. En nuestro caso, como somos cuerpos comunes, puedes estar destinado en Tierra, en la Armada, en un buque, en el ejército del Aire, puedes estar en el órgano centra, es tan ilimitado… y cada dos años puedes cambiar. Y hoy puedes estar en Madrid, mañana en Canarias y luego en el Líbano, – es muy raro el militar que no se tiene que ir a una operación- y haciendo una estupenda labor. No tiene límites el enriquecimiento personal.
El Consejo internacional de enfermeras (CIE) es una federación de más de 130 asociaciones nacionales de enfermeras (ANE) en representación de los más de 20 millones de enfermeras en todo el mundo. Fundado en 1899, el CIE es la primera organización internacional y de mayor alcance para los profesionales de la salud. Dirigido por enfermeras y liderando a las enfermeras en el ámbito internacional, el CIE trabaja para garantizar cuidados de enfermería de calidad para todos, así como políticas de salud sólidas a nivel global, el avance de los conocimientos de enfermería y la presencia en todo el mundo de una profesión de enfermería respetada y una fuerza laboral de enfermería competente y satisfecha.
David Benton, director general del Consejo Internacional de Enfermería; con él repasamos la situación de este sector sanitario en España y en el mundo. “Los salarios de la enfermería no reflejan la complejidad de esta profesión ni la saturación del trabajo”, afirma. Sus palabras destilan luces y sombras
El Consejo Internacional de Enfermería es una federación de más de 130 asociaciones que representan a más de 16 millones de profesionales de este sector sanitario en todo el mundo.
Su director general es el escocés David Benton. EFEsalud ha hablado con él para conocer las dificultades y amenazas de esta profesión, pero también sus fortalezas y oportunidades.
David Benton/Foto facilitada por el Consejo General de Enfermería de España
¿Cómo define la situación actual de la enfermería en el mundo?
La situación es extremadamente variada en todo el planeta. En primer lugar, en términos cuantitativos, aquí en España las últimas estadísticas de la Organización Mundial de la Salud (OMS) reflejan que hay 50,8 enfermeras por cada 10.000 habitantes. Otros países –como Australia, Finlandia, Alemania o Japón- tienen el doble.
Con todo, el número de enfermeras en otros países es muchísimo más bajo: en Bangladesh sólo hay 2,2 enfermeras por cada 10.000 personas; en Somalia sólo 1,1. Sin embargo, hay que tener cierta cautela al interpretar esas cifras porque la fiabilidad de los datos ha sido cuestionada en varios países.
¿Han sido las enfermeras unas de las principales víctimas de la crisis económica?
Sí. Durante la crisis muchos gobiernos han hecho recortes oportunistas y muchas enfermeras han visto cómo se recortaban sus salarios. En muchos casos, tampoco han sido sustituidas y la reducción salarial persiste hoy en día acompañada de una subida de impuestos.
En el lado positivo, los estudios sobre el impacto de la crisis económica muestran la importancia del mantenimiento de un alto estándar en la atención sanitaria y la calidad de la educación y la cualificación de las enfermeras es esencial.
Un reciente estudio, publicado por The Lancet, mostró que el incremento de un 10 por ciento del número de enfermeras con estudios universitarios se traduce en un descenso del 7 por ciento en el riesgo de muerte. Nuestros ciudadanos deben saber que las acciones de los gobiernos para reducir el personal de enfermería o su nivel de formación tiene la más grave de las consecuencias: la muerte.
¿Cuál es el papel de la enfermería en el sistema sanitario?
Los enfermeros y enfermeras desempeñan un importante papel, puesto que son la profesión sanitaria más numerosa y en algunos países son el único profesional para prestar atención sanitaria a una parte de la población. Los enfermeros juegan varios roles en el sistema sanitario: practicantes, gestores, educadores, investigadores, políticos y trabajadores de equipo.
Los gobiernos empiezan a darse cuenta que una gran parte de la solución a los retos en materia de salud pasa por la enfermería. Por ello, algunos países están diseñando nuevos y avanzados roles para la enfermería, de cara a mejorar el acceso al sistema y ayudando a reducir los costes al desempeñar algunas funciones que recaían en manos de los médicos y expandiendo así el rango de acción de nuestra profesión.
Las enfermeras líderes deben involucrarse ahora en el desarrollo de programas para mejorar los servicios sanitarios. Ellas tienen el conocimiento práctico sobre cómo el servicio puede ser concebido y diseñado, coordinado e implementado. España ha dado pasos importantes en este sentido, en términos de especialización y de competencias profesionales para incrementar el acceso ciudadano a estos servicios a través de cambios en la política de prescripción.
¿Cree que los enfermeros están bien considerados como profesionales sanitarios si los comparamos con otras profesiones como médicos o farmacéuticos?
Una vez más, debemos decir que existe una gran variación entre naciones. Históricamente, siempre ha habido diferencias en materia de género. Habida cuenta de que continúa siendo una profesión predominantemente femenina, tiende a ser una profesión devaluada e infrapagada. En la mayor parte de los países, los salarios de la enfermería no reflejan la complejidad de esta profesión ni la saturación de trabajo.
Por desgracia, es cierto que en algunos países, las enfermeras deben superar numerosos obstáculos para acceder a la educación y avanzar en su desarrollo profesional.
¿Cómo definiría la relación con los médicos?
Desde el punto de vista de equipo clínico, la relación es a menudo muy buena, particularmente donde hay una visión compartida de la atención prestada y el deseo de conseguir lo mejor para el paciente.
Sin embargo, a nivel profesional la tensión existe cuando las fronteras históricas son marcadas por los médicos en detrimento de la atención al paciente. El Consejo Internacional de Enfermeras (CIE) ha elegido trabajar de la mano de la Asociación Médica Mundial, la organización internacional que representa a los médicos.
¿Cuáles son las principales características que debe reunir un enfermero?
Llegar a ser un buen enfermero no sólo requiere habilidades prácticas, es preciso tener unos sólidos conocimientos técnicos y de la naturaleza humana y una correcta actitud de cara a ofrecer el máximo apoyo a los pacientes y sus familias a lo largo de todo el ciclo de la vida.
El código ético del CIE para enfermeras no se limita a los cuatro principios de un comportamiento ético, sino que identifica las características que definen la esencia de la profesión enfermera.
Incluye valores como respeto, sensibilidad, compasión, confianza, integridad, responsabilidad, práctica basada en la evidencia, seguridad, condiciones de trabajo equitativas y justas, respeto por los derechos humanos, entre otros.
¿Cuáles son los principales retos de la enfermería en los años venideros y en un futuro a más largo plazo?Foto facilitada por el Consejo General de Enfermería
Uno de los grandes retos que España y otros países deben afrontar es el incremento de la población mayor con unas necesidades muy complejas y menos apoyo por parte de las familias que en generaciones anteriores.
La población envejecida requiere desplazar el foco desde un modelo centrado en los cuidados agudos hacia otro enfocado hacia las enfermedades crónicas, como el alzhéimer, las patologías cardíovasculares o la osteoporosis. De la manos de las enfermedades crónicas llega también la incapacidad y eso significa cuidados a largo plazo, como enfermeras domiciliarias, residencias, centros de día o pisos compartidos.
Todo ellos será muy importante en los próximos años. El cuerpo de enfermeras, asimismo, también está envejeciendo. Dentro de 10 o 15 años, los países industrializados experimentarán un gran éxodo de enfermeras, muchas se jubilarán justo en el momento en el que habrá una gran demanda de estas profesionales. Encontrar maneras de retener a las enfermeras mayores es un reto cada vez mayor importancia a los sistemas de salud en todo el mundo.
El reto del manejo de las enfermedades que no son de declaración obligatoria también está ahí. Estas patologías matan a más de 36 millones de personas cada año. Las enfermeras están en una posición privilegiada para liderar y mantener la respuesta a esas enfermedades crónicas que no hacen más que crecer, como parte de un preparado y proactivo equipo sanitario y informando, motivando y cuidando de los pacientes y sus familias. Podemos proporcionar creativas e innovadoras soluciones al reto de las enfermedades crónicas y cambiar el día a día de las vidas de los pacientes, las familias y las sociedades.
El tercer gran reto pasa por el uso creativo de las tecnologías para realizar la misión de cuidado a los pacientes. La sociedad tendrá más información sobre salud que nunca desde sus trabajos y sus casas. La capacidad y habilidad de la enfermería para adaptarse a esta nueva situación y aplicar adecuadamente las herramientas tecnológicas determinará buena parte de nuestro éxito o fracaso como profesionales de la salud.
Los países que invierten y desarrollan su fuerza de trabajo de enfermería y partería pueden lograr una expansión rápida y rentable de UHC de alta calidad.
Este es el hallazgo principal de un nuevo informe publicado hoy por la Cumbre Mundial de Innovación para la Enfermería (WISH) y el Foro UHC 2020 en la Conferencia WISH 2018, que sostiene que, a menos que la enfermería y la partería se expandan y desarrollen rápidamente, no hay posibilidad de lograr el objetivo de la Asamblea Mundial de la Salud de un billón de personas más que se beneficiarán de la cobertura universal de salud en cinco años.
Coautor de Lord Nigel Crisp, Copresidente de Nursing Now y la profesora Sharon Brownie, Decana de la Escuela de Enfermería de la Universidad Aga Khan, y de la Dra. Charlotte Refsum, el informe incluye nuevos datos sobre las percepciones públicas de las enfermeras y matronas en siete países . Los datos muestran un fuerte respaldo público para las enfermeras que desempeñan un papel más importante en los servicios de salud, y refuerza el argumento adicional del informe, según el cual las enfermeras están en una posición privilegiada para manejar los desafíos de salud que definen los tiempos modernos.
“The world is facing a shortfall of 18 million health workers needed to deliver and sustain universal health coverage by 2030.” said Dr Tedros Adhanom Ghebreyesus, Director-General of WHO, writing in the foreword of the report. “More than half of that shortfall is nurses and midwives. This report makes a persuasive set of arguments for investing in nursing and midwifery as part of a mulitdisciplinary, people-centered workforce.”
Hablando en el lanzamiento del informe, Lord Nigel Crisp dijo: “Hasta la fecha, las discusiones sobre la entrega de UHC se han centrado en la financiación y el acceso al servicio sin la suficiente consideración de la inversión en la fuerza laboral de salud. Nuestro informe muestra que al rediseñar los servicios de salud a nivel nacional para hacer un mejor uso de las enfermeras y matronas, los países pueden lograr una cobertura de salud universal de alta calidad y rentable y maximizar sus recursos humanos existentes «.
Sobre la base del éxito de la campaña Nursing Now, cuyo objetivo es empoderar a las enfermeras en todo el mundo y ha generado apoyo en 67 países desde su lanzamiento en febrero, el informe desglosa el argumento para invertir en enfermería y partería en los siguientes titulares:
Expansión rápida : el informe sostiene que los países pueden lograr una expansión rápida de la Cobertura Universal de Salud haciendo el mejor uso del personal existente e introduciendo cambios en la prestación y la práctica del servicio. En particular, esto significa permitir que las enfermeras y parteras trabajen a su máximo potencial mediante la creación de más clínicas dirigidas por enfermeras, ayudándolas a desempeñar un papel más central en la atención primaria, empleando a más enfermeras especializadas y desarrollando más servicios de partería.
Expansión rentable : la evidencia en el informe muestra que la expansión rentable de la Cobertura Universal de Salud dependerá en gran medida de permitir y capacitar a la fuerza laboral existente, incluidas enfermeras y matronas, para que trabajen de manera más efectiva. Además de los ejemplos enumerados en Rapid Expansion, existe un enorme potencial para que las enfermeras amplíen su alcance de la práctica mediante el intercambio de tareas. Un estudio citado en el informe estimó que las enfermeras de práctica avanzada pueden completar aproximadamente el 70 por ciento de la carga de trabajo de un médico de cabecera.
Expansión de alta calidad : existe evidencia del impacto que tienen las enfermeras y un enfoque holístico centrado en el paciente en la calidad, incluidos los estudios que muestran que los médicos y las enfermeras generalmente logran resultados de salud equivalentes para el manejo de las ENT a largo plazo, aunque las enfermeras a menudo obtienen puntuaciones más altas Satisfacción del paciente y por adherencia al tratamiento. Las enfermeras también suelen ofrecer más consejos de promoción de la salud y prevención de enfermedades al mismo tiempo.
Al comentar sobre el informe, la profesora Sharon Brownie dijo: “La política global actual en UHC apenas menciona a la fuerza laboral de salud, y mucho menos a la enfermería y la partería. Habría un efecto profundo en la rapidez y la eficacia con la que se podría implementar UHC si una parte significativa de la fuerza laboral estuviera capacitada para trabajar de manera más efectiva o para asumir nuevos roles «.
«ICN se complace en dar la bienvenida a este nuevo informe sobre la cobertura de salud universal y de enfermería», dijo Annette Kennedy, Presidenta del Consejo Internacional de Enfermeras y Comisionada de la Comisión de Alto Nivel de la OMS para enfermedades no transmisibles. “Varios estudios han encontrado que los servicios dirigidos por enfermeras y obstetricia están dando resultados positivos y de alta calidad para los pacientes, especialmente aquellos relacionados con enfermedades no transmisibles, y son rentables para los sistemas de salud. El CIE respalda las recomendaciones del informe y solicita la inversión en enfermería y partería para un seguro de salud rápido, rentable y de alta calidad «.
Este informe se ha publicado en coordinación con la campaña Nursing Now, que tiene una misión de tres años para promover y capacitar a las enfermeras y matronas en todo el mundo. La campaña culminará con la Conferencia de Florence Nightingale en 2020, un evento que marca el 200 °cumpleaños de la mujer considerada como la fundadora de la enfermería moderna.
El Programa de Líderes en Salud Internacional Edmundo Granda Ugalde (PLSI) es un programa de formación desarrollado por la Organización Panamericana de la Salud (OPS) para contribuir a fortalecer la capacidad nacional en salud internacional. El Programa de nueve meses está ubicado dentro del Campus Virtual de Salud Pública (CVSP) e incluye componentes virtuales y presenciales.
Objetivo
Contribuir al logro de los mandatos regionales y globales mediante el fortalecimiento de las capacidades de los países en las Américas para comprender, actuar e influir de manera positiva sobre los determinantes internacionales de la salud, promover sus intereses y concertar acciones intersectoriales en salud en los ámbitos internacionales, guiados por el principio de una mayor equidad global en salud.
¿Por qué participar?
La necesidad de líderes capacitados para abordar el entorno global complejo actual es imperiosa. La Estrategia de acceso universal a la salud y cobertura universal de salud, la Agenda de Desarrollo Sostenible 2030 y otros acuerdos regionales y globales establecen un conjunto ambicioso de prioridades y compromisos, los cuales requieren de una acción intersectorial e internacional para su logro de una manera equitativa y solidaria. Al mismo tiempo, el desarrollo de nuevas tecnologías, la expansión del comercio, la creciente migración de las poblaciones, y enfermedades emergentes y reemergentes han creado nuevas y urgentes exigencias para los Estados. A los líderes se les pide cada vez más que formulen y ejecuten acciones tomando en cuenta tratados y acuerdos bilaterales y multilaterales y que cumplan con mandatos regionales y globales en un ambiente compuesto de nuevos actores, alianzas y estructuras. Se les exige acciones que transcienden los sectores y las fronteras para lograr el equilibrio entre el crecimiento económico, el desarrollo social y el derecho a la salud, y para desarrollar políticas públicas que abordan estos desafíos mientras contribuyen a una mayor equidad global.
El PLSI colabora con los países en la región de las Américas en abordar esta necesidad a través del desarrollo de capacidad en seis áreas de competencia clave: análisis del entorno; formulación de políticas y toma de decisiones; negociación y abogacía; gestión de proyectos y cooperación; producción e intercambio de conocimiento; y comunicación